Esperaron por horas con sillitas de playa, neveritas, radios y hasta juegos de cartas... pero, sobre todo, muchas ganas de comprar.

Es el día del año en el que más se vende, y el punto de partida de las compras navideñas. Y es que las ofertas que se esperan en el Viernes Negro, sobre todo en época de recesión económica, llevan a más de uno a tirarse la maroma y esperar por horas para ahorrarse unos chavitos en sus compras de temporada.

El año pasado, hubo episodios de terror en algunos comercios. De hecho, en una tienda de artículos electrónicos en el área metropolitana, la ola humana pudo más que las puertas de metal que resguardaban el local, provocando empujones, pisotones y personas golpeadas, todo en nombre de ahorrar.

Hay quienes prefieren ahorrarse el revolú, pero muchos hasta se disfrutan el correcorre. Hoy no fue la excepción: desde tempranas horas de la madrugada se podían apreciar largas filas de ansiosos consumidores.

Para los que consiguieron buenos precios y lograron encontrar los artículos que esperaban, enhorabuena. Si no, recuerde que siempre puede comprar en Internet, este lunes, donde también hallará ofertas a precios de quemazón.