A Paola Nicole le encanta la clase de música, jugar con muñecas “que parecen bebés”, practicar voleibol y cuando sea grande quiere ser “chef”.

Sin embargo, a la niña de 8 años y vecina de l barrio Cuchillas en Corozal, el huracán María la llevó a compartir su tiempo con los necesitados y llevarles un rayo de luz y esperanza.

Primera Hora supo de Paola Nicole Díaz Vélez, que tiene dos hermanos, cuando en las redes corrió una carta que escribió sobre “lo que aprendí de María”.

En esta, cuenta que todos los días se levanta temprano para ayudar a su mamá, Adymar Vélez, quien es directora en la escuela Demetrio Rivera, donde 50 estudiantes perdieron sus casas.

La menor estudia en la José Padín y ambos planteles  fueron reabiertos la semana pasada.

Como Paola Nicole no tenía clases ayudaba a su madre  en las trabajos de limpieza de la escuela y por las tardes la acompañaba a llevar ayuda a los necesitados.  Aunque ya comenzaron las clases, ambas, junto a otros miembros de la facultad, siguen visitando comunidades.

En la cartita, publicada en la cuenta de Twitter del legislador Rafael “June” Rivera, Paola Nicole confiesa que llora cuando encuentra familias “que perdieron sus hogares”.

“Les llevamos comida, ropa y ellos nos cuentan sus experiencias… Hay veces que me pongo triste porque veo a los niños triste y lloro”, expresó en la misiva que escribió en un rato de “aburrimiento”.

“Todos los días aprendo mucho y le doy gracias a papito Dios por cuidarme y a mis padres por enseñarme a ayudar a los demás”, agregó en la carta que fue precedida por un dibujo.

“Me gusta dibujar porque así expreso mis emociones”, dijo a este diario mientras sostenía en su manos la hoja de papel con el dibujo de una casa que perdió el techo y tiene un toldo azul, una familia recibiendo los suministros que ellos le llevan, la bandera de Puerto Rico formando el mapa de la Isla y la frase ‘Puerto Rico se levanta’ y ‘Ayuda a los demás de corazón’.

¿Dónde escuchaste la frase ‘Puerto Rico se levanta?

“En un montón de sitios” dice riendo.

Narró que un día fue a llevar ayuda al barrio Joya Fría de Corozal “y cuando llegamos el nene (de unos 14 años) se metió en el cuarto y empezó a llorar porque perdió la casa completa y la única ropa que tenía era la que tenía puesta”. Todos lloraron juntos y ella abrazó al nene.

Mientras redactaba su carta, de vez en cuando esta le preguntaba a su madre cómo se escribía tal o cuál palabra. En una ocasión le preguntó por la palabra hogar y su madre le dijo que escribiera casa, pero Paola Nicole dijo que no era lo mismo.

Primera Hora indagó.

“En los hogares la gente se queda y las casas es como si estuvieran solas”, respondió.

Aseguró que la pone feliz ayudar a las personas y “cuando vamos a las casas y los viejitos me abrazan”.

¿Qué mensaje tienes para los niñ@s de Puerto Rico?

“Que nunca se rindan; que Puerto Rico siempre va estar en pie y que ayuden a los demás… Puerto Rico se va a levantar porque hay mucha gente ayudando, de allá afuera y de aquí”, agregó.

Por su parte, Vélez dijo que cuando vio la carta de su hija se emocionó. “Empezé a llorar porque uno ve que a pesar de las situaciones que pasan los niños siempre aprenden y ven el ejemplo de las demás personas”.

El padre de la niña, Luis Omar, también ayuda a suministrar agua a los necesitados, incluyendo a los encamados.

Paola Nicole, no olvidé que quieres ser chef. ¿Por qué?

“Porque me gusta cocinar”.

¿Y cuál receta haz preparado?

“Unos cupcake”.

Aunque sus padres y primitos comieron de ellos a ella no le gustaron.

“Yo no probé los cupcakes porque no sabían buenos”, confesó al decir que sin probarlos se imaginó que no le gustarían.