El líder homosexual, Pedro Julio Serrano, exhortó este viernes a los religiosos católicos de la Isla a “dejar la obsesión” con los derechos reproductivos de la mujer y los derechos de la comunidad de lesbianas, gays, bisexuales, transgéneros y transexuales (Lgbtt), tal y como instó el papa Francisco.

“Si el papa Francisco dijo que la Iglesia ‘no puede interferir espiritualmente’ con las mujeres y las personas Lgbtt, tampoco puede interferir con sus derechos bajo la ley. ¿Escucharon bien padre Carlos Pérez, arzobispo (Roberto) González Nieves y demás obispos en Puerto Rico? Ya basta de seguir con la ‘obsesión’ de meterse en la vida de las mujeres y las personas Lgbtt, tratar de negarles sus derechos y al mismo tiempo, lastimar su dignidad”, expresó Serrano en comunicado de prensa.

Ayer, jueves, el papa Francisco dijo que “la religión tiene el derecho de expresar su opinión, pero Dios en su creación nos ha hecho libres. La Iglesia no puede interferir espiritualmente en la vida de una persona. No podemos seguir insistiendo en cuestiones referentes al aborto, el matrimonio homosexual o al uso de anticonceptivos. Es imposible”.

 El líder de la Iglesia católica aceptó que muchos religiosos se habían “obsesionado” contra el aborto y los gays, y que, a su juicio, “no es necesario estar hablando de estas cosas sin cesar”.

Ante tales expresiones, Serrano argumentó que los religiosos de Puerto Rico deben detener su obstinación contra la comunidad Lgbtt.

“La feligresía y hasta algunos sacerdotes y monjas ya aceptan y acogen a sus hijos, familiares y amigos que son Lgbtt. Ahora falta que los sacerdotes, obispos y el arzobispo los acojan de igual manera”, dijo el portavoz de Puerto Rico Para Tod@s, organización que lucha por la igualdad de derechos y la inclusión de las personas homosexuales y la justicia social.

Indicó que si no se detiene la obsesión en contra de estos grupos “la Iglesia corre peligro de caer como un castillo de naipes”.

El Nuevo Día publico este viernes un reportaje en la que religiosos católicos reaccionan a las expresiones del papa. Señalan que las mismas ocurrieron en un espíritu de apertura.