La venta del conocido estacionamiento doña Felisa Rincón en el Viejo San Juan, preocupó a ciudadanos que utilizan el lugar ante la posibilidad de que aumente la tarifa por ese servicio. 

“Lo que nos asusta es el aumento del precio... Es bien barato, siempre me estaciono aquí”, comentó Héctor Delgado a Primera Hora durante una visita al estacionamiento. 

Sin embargo, Delgado opinó que la decisión pudo ser correcta si es que la alcaldía necesita dinero porque “son activos y quizás el mantenimiento que necesite sea mayor con el paso del tiempo y el municipio puede librarse de eso”. 

La alcaldesa de San Juan, Carmen Yulín Cruz, dijo que vendió este mes el inmueble a la empresa Muñoz Bermúdez, S.E., por $11.5 millones. 

La compañía deberá seguir usando la estructura como estacionamiento, mantener el nombre y no podrá aplicar ningún aumento en la tarifa durante los próximos seis meses. 

Con el dinero de la venta se pagará un préstamo de $10.4 millones, según informes de prensa. 

A Ángel Betancourt, de 75 años, la noticia lo sorprendió porque “en el Viejo San Juan no hay dónde parquear por una cantidad razonable”.

“¡¿Qué vamos a hacer?! Todos los demás sitios son carísimos”, agregó.

El estacionamiento doña Fela, ubicado en la calle Recinto Sur, está abierto 24/7, es bajo techo y tiene una tarifa de $1.40 la primera hora y $0.55 la hora adicional. De 4:00 p.m. a 6:00 a.m. contempla una tarifa fija de $4.45. 

En el Viejo San Juan hay otros seis estacionamientos. 

“Van a subirlo cuando pasen los seis meses”, opinó José Marrero, de 51 años, quien dijo que de no haber opción de transporte masivo adecuada al Viejo San Juan, el servicio de estacionamiento es esencial.

“El parking siempre está lleno. Las mensualidades que hay nadie las quiere soltar. Hay lista de espera y no he podido (entrar). Ya ni apuntan”, dijo Deborah Santos, de 37 años y quien trabaja en la zona histórica.

Para otros el lugar, además, tiene un valor histórico -la construcción del edificio inició en el 1964- porque “este parking es casi un monumento histórico, desde que yo soy niña existe”, expresó Mayda Rohena, de 56 años. 

Del mismo modo opinó don Antonio López, de 88 años, al decir que “no estoy de acuerdo. Esto es un patrimonio de la ciudad”.

Alcaldesa se defiende

Cruz destacó que la venta “tuvo un proceso de vistas públicas en el que participaron vecinos del Viejo San Juan, me comunicaba y me comunico directamente con ellos a través de correos electrónicos”. 

Sostuvo que los compradores “tendrán que pasar por un proceso normal de las regulaciones para solicitar un aumento, si así lo requieren”.

“Creo que es importante saber que ese negocio era bueno para los arrendatarios y malo para el Municipio. Le dejaba alrededor de $300 mil en ingresos, pero luego había que restar que el Municipio tenía que pagar el agua y la luz. No era costo efectivo y de cara a este nuevo cuatrienio los municipios tenemos que reinventarnos y determinar cuáles son esos servicios básicos”, dijo la Alcaldesa para agregar que un estacionamiento no es un servicio esencial.

Agregó que para poner en condiciones el estacionamiento, necesitaban entre $5 a $6 millones.

“Lo que obtuvimos de $11.5 millones es el equivalente como a 38 años de lo que se pagaba anualmente sin quitarle el negocito ese bueno para ellos que el municipio pagaba el agua y la luz. Así cualquiera”, añadió Cruz.

Nydia Bauzá colaboró con esta historia.