Laura quedó embarazada a los 14 años y a los 15 tuvo su primero de tres hijos. Hoy, a sus 24 años, reconoce el impacto de la maternidad temprana en su vida.

“Cambió mi vida en todo... tuve que dejar los estudios, tuve que dejar las salidas con mis amigas, apartarme de todo lo que me gustaba hacer”, expresó esta joven, quien parió mediante cesárea.

Ese embarazo a los 14 años la obligó a madurar y asumir responsabilidades temprano en la vida. Esta chica, que hoy es madre soltera, soñaba en su adolescencia con el modelaje y estaba tomando clases de voleibol. Ahora, además de cuidar a sus tres hijos, ocasionalmente trabaja en el negocio de su abuelo y comenzó estudios en enfermería hace un mes.

“Tuve que romper todos mis sueños por cuidar a mis hijos. Ha sido una bendición pero hubiese preferido terminar mis estudios y luego ser madre”, reflexionó la chica del centro de la isla.

Casi la población de Culebra

En Puerto Rico, 1,816 menores de edad quedaron embarazadas en los pasados 5 años, según estadísticas vitales del Registro Demográfico suministradas por el Departamento de Salud (DS).

La estadística suministrada del periodo 2010 a 2014 refleja que la edad más tierna en la que niñas dieron luz a bebés fue a los 12 años. Por ejemplo, en el 2014 hubo dos menores de esa edad que parieron, implicando que pudieron quedar embarazadas a los 11 años, pero también hubo situaciones como que en el 2010 hubo 10 alumbramientos de niñas de 13 años.

Las estadísticas comienzan con casi medio millar en 2010, con 459 menores de 15 años teniendo hijos en 2010 pero, tal y como se ha reducido la población del país, en años subsiguientes las cifras se han reducido poco a poco: 414 madres de entre 10 a 15 años tuvieron hijos en el 2011, la cantidad fue de 395, en el 2012, se reportaron 395 en el 2013, y en 2014 se registraron 231.

El año pasado incluso, hubo dos niñas dieron luz a los 12 años, lo que implica que probablemente quedaron embarazadas a los 11.

Al sumar esas estadísticas suministradas por el DS, entre 2010 a 2014, la cifra de menores teniendo hijos ascendió a 1,816, comparable con la población total del municipio de Culebra, que según el censo de 2010 tenía 1,818 habitantes.

En Puerto Rico, no se registraron nacimientos de menores de 12 años entre 2010 y 2015, pero una fuente gubernamental aseguró que hubo un caso en 2007 de una niña de 10 años que salió embarazada.

A nivel internacional, recientemente acaparó titulares un caso en Paraguay de una menor que quedó embarazada a los 10 años producto de una violación a manos de su padrastro. Organismos defensoras de derechos humanos abogaban por que se le permitiera abortar para no poner en riesgo su vida, lo que no fue autorizado por el gobierno.  La madre parió mediante cesárea en agosto y se informó que la hija y su niña estaban en buen estado de salud.

Riesgo para la vida y factor para el maltrato infantil

La directora de la Administración de Familias y Niños (Adfan), Vanessa Pintado, indicó que la mayoría de los embarazos entre adolescentes ocurre por diferentes circunstancias: una relación consentida pero no apropiada por la falta de capacidad legal, relaciones sexuales por uso de alcohol y drogas, o que sean producto de abuso sexual.

“Resulta preocupante. Aunque los números han estado bajando y esperamos que siga bajando, pero la preocupación radica en que esas menores que dan a luz ni sus cuerpos ni sus mentes están preparadas para ser madres”, expresó Pintado a Primerahora.com.

Agregó que la mayoría de los embarazos de menores se da en áreas rurales.

“Son menores dando a luz”, expresó al respecto la doctora en sicología clínica Sarah Lladó, administradora auxiliar de prevención en la comunidad de Adfan. “Aunque no son todos los casos, esto frustra el porvenir de las menores”, dijo Lladó.

Pintado explicó que la adolescencia es un proceso de formación de la personalidad y por lo tanto en esas edades no están capacitadas para ser un ejemplo y cuidar de un menor de edad.

“Es un evento que no es esperado en esa etapa de la adolescencia”, agregó la doctora Lladó, quien junto a Pintado atendieron a este medio en entrevista telefónica.

Más allá de ese aspecto social, Pintado dijo que a esas edades, físicamente hablando, el cuerpo de una menor de edad también está en formación, y que el embarazo a tan tierna edad es un riesgo para la vida, tanto de la madre como para el bebé que nace.

Pero, aparte del impacto físico y en el desarrollo de un embarazo en una menor, también está el cuestionamiento de cómo va a poder sustentar económicamente a otro ser humano.

“Estas menores no tienen la capacidad económica para sostener este bebé, y como país esperamos que las menores terminen sus estudios y se integren a la fuerza laboral. Cuando se rompe este ciclo, tenemos estas disyuntivas sociales: deserción escolar, se podrían mantener en el círculo de la pobreza y dependientes de ayudas sociales”, dijo Pintado.

Ese embarazo a tan temprana edad también es un peligro para el menor, porque esos infantes caen en al menos dos categorías de riesgo de maltrato, explicó Pintado.

“Uno de los indicadores de riesgo es que sea un menor no deseado y  la mayoría de estos embarazos de niñas adolescentes fueron así, no deseados, así que ese es un menor con mayor susceptibilidad de ser maltratado", afirmó la titular de la agencia.

"Otro factor de riesgo (de maltrato) es que la persona no tenga las destrezas de crianza, y, lógico una niña de 14 años no tiene las destrezas adecuadas porque está en su propio proceso de desarrollo”, agregó Pintado.

Para superar con algún éxito estos problemas inherentes a la  maternidad en menores de edad, es crucial el apoyo familiar que tenga esa menor, afirmó Lladó.

Víctimas de delito

Pintado precisó que esas menores de 15 años dando a luz serían para efectos de ley víctimas de violación -o el delito de agresión sexual-, esto aunque la menor y el padre del infante hayan querido voluntariamente tener relaciones sexuales.

Eso se debe a que los menores no tienen lo que se conoce como capacidad al amparo del Código Civil, incluso ante la posibilidad de casarse, explicó Pintado, abogada de profesión. “Ninguna menor se puede casar sin el término de pubertad legal, que es a los 16 años”, agregó.

“Se considera una violación técnica, no tiene la capacidad para consentir (legalmente a sostener relaciones sexuales)”, dijo Pintado.

Los padres de esos bebés podrían incluso ser llevados a los tribunales para enfrentar cargos criminales pero “eso depende de la evaluación del fiscal”.

Bajo el artículo 130 del Código Penal, una persona comete el delito de agresión sexual si lleva a cabo un acto de penetración sexual cuando “la víctima al momento del hecho no ha cumplido 16 años”.

El acusado de agresión sexual se expone a una pena fija de 50 años, pero, cuando la fémina queda embarazada, se considera un agravante y se aumenta la pena a los 65 años de prisión.

Ese sería el caso de la menor que fue presuntamente víctima de abusos sexuales desde los 9 años, que quedó embarazada a los 11 y por el que ahora hay cerca de nueve personas acusadas, esto en hechos ocurridos entre Gurabo y Trujillo Alto.

Pintado dijo que Adfan ha dado atención a esta menor, que está bajo la custodia del Estado, pero no divulgó cuántos otros casos similares maneja la agencia. “Esos casos sí los atendemos, los tenemos. Son casos sumamente sensitivos porque la huella que deja, ese trauma en la vida de ese menor, es sumamente profunda”, aseveró.

Ayudas disponibles desde Adfan

Adfan, el brazo del Departamento de Familia que atiende específicamente el renglón de los menores, tiene diferentes herramientas para atender estos casos, según se indicó.

La doctora Lladó precisó que el área de prevención en la comunidad tiene servicios educativos con 16 talleres que abordan, entre otros temas, el tema de la sexualidad y los embarazos en la minoría de edad.

Asimismo, para las menores que están embarazadas, existe el programa de enfermeras visitantes Nido Seguro, para ofrecer cuidado prenatal, posparto y crianza hasta los tres años del infante.

Este programa solo opera en las regiones de Humacao, Ponce y Mayagüez, que son las regiones donde más se reportan casos de embarazos de adolescentes.

De otra parte, el Departamento de la Familia tiene el programa Familia en tu Comunidad para visitar escuelas y se orienta a los menores y se toca el tema de abuso sexual.