El patrón de aguaceros pasajeros a través de la región continúa afectando brevemente la zona este de Puerto Rico en horas de la mañana, pronosticó el Servicio Nacional de Meteorología (SNM) de San Juan.

Así mismo, entrada la tarde se espera el desarrollo de lluvias en el cuadrante oeste, según el SNM.

“Una onda tropical débil va a entrar a la vecindad, inyectando un poquito más de humedad, pero en términos generales no se esperan cambios significativos”, sostuvo la meteoróloga Odalys Martínez.

En cambio, para el fin de semana se espera aire seco con la entrada de una masa de aire estable, por lo que la lluvia será limitada.

Las temperaturas rondarán los altos 80 y bajos 90 grados Fahrenheit con vientos de 15 nudos provenientes mayormente del este.

Aunque el SNM asegura que la presencia del particulado del polvo del Sahara ha disminuido en la región, la Junta de Calidad Ambiental (JCA) indicó en su informe que la calidad de aire para la región sur es insalubre para grupos sensitivos.

Imagen de satélite que muestra la nube de polvo del Sahara en el océano Atlántico y el mar Caribe. (NOAA)
Imagen de satélite que muestra la nube de polvo del Sahara en el océano Atlántico y el mar Caribe. (NOAA)

La JCA reporta diariamente la calidad de aire en Puerto Rico según la escala AQI que va del 0 al 500, siendo 100 la escala normal nacional. Esto indica cuán limpio o contaminado está el aire y qué precauciones se deben tomar de acuerdo con cómo esté.

Según la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA, por sus siglas en inglés), los episodios de polvo del desierto del Sahara se registran a finales de la primavera, durante el verano y temprano en el otoño. Se trata de una masa de aire muy seca, cargada de polvo del desierto, que se mueve usualmente hacia el océano Atlántico Norte cada tres a cinco días.

Este particulado afecta la salud de las personas, sobre todo en aquellas que son sensibles a los alérgenos y los que padecen de problemas pulmonares.

De otro lado, Martínez afirmó que las condiciones marítimas “están buenas” con oleaje por debajo de los cinco pies y que al momento no hay ninguna advertencia en efecto.

“Hay riesgo moderado de corrientes submarinas para la costa norte de Puerto Rico, en el resto de las playas el riesgo es bajo”, concluyó.