Una veintena de mujeres con sus senos al descubierto reclamó este martes respeto al derecho que tienen todas las féminas a decidir sobre sus cuerpos, precisamente, delante de un mural que fue vandalizado con pintura blanca para tapar los pechos de la mujer negra que lo protagoniza.

De acuerdo con Amárilis Pagán, portavoz del Proyecto Matria, se trató de una acción “más contundente” que podría redefinir el estilo de manifestaciones futuras que realizarán en su misión de concienciar sobre la erradicación de la violencia contra las mujeres, que es el propósito de la obra creada por artistas del colectivo Moriviví.

“Decidimos retomar el tema del cuerpo desde una exposición abierta. El hecho de que el mural haya sido vandalizado de esa manera nos ha hecho reflexionar cómo las mujeres tenemos que ser, quizás, más agresivas y más contundentes en recuperar nuestro derecho a ser dueñas de nuestros cuerpos”, explicó Pagán, quien participó del performance.

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El grupo, compuesto por mujeres de distintas edades y profesiones, se reunió a las 5:00 p.m. frente al mural pintado en un costado del puente del expreso José de Diego, en la avenida Fernández Juncos, en San Juan. De frente a la obra, se quitaron sus blusas y luego se voltearon hacia la carretera, donde a esa hora decenas de automovilistas transitaban por el lugar. 

En un periodo que no excedió los 10 minutos, imitaron la postura de la mujer del mural, con el brazo derecho levantado cubriéndose el rostro, y luego se tomaron de las manos “en señal de solidaridad y fuerza colectiva”, según interpretó Pagán.

“La diversidad de mujeres de la Isla pudimos verla frente al mural porque no podemos como feministas validar que estéticamente solamente un tipo de cuerpo es válido. Todos los cuerpos de las mujeres tienen belleza, todas las mujeres tienen derecho a disfrutar de su cuerpo y a tomar decisiones sobre su cuerpo”, puntualizó la abogada.

El mural, creado hace un año, presenta dos mujeres desnudas con mariposas monarcas pegadas a su cuerpo. Durante la madrugada del martes, la obra fue intervenida sobre ambas figuras con pintura blanca en forma de ropa interior. 

La Coordinadora Paz para la Mujer presentó este miércoles una querella por vandalismo ante la Policía de Puerto Rico. La organización utiliza el espacio donde ubica el mural bajo el programa Adopta una carretera, del Departamento de Transportación y Obras Públicas. 

“Esperamos que la Policía haga ese trabajo porque entendemos que este es un acto de vandalismo que se ha hecho contra el trabajo que desarrolló el colectivo Moriviví. Nosotras le vamos a estar dando seguimiento”, indicó Vilma González Castro, de la Coordinadora Paz para la Mujer.

Un segundo mural que iba a ser pintado por las mismas artistas -Anamaris Sierra Pagán, Raisa Rodríguez, Estefanía Rivera Cortés, Sharon Nicole González y Joey Díaz Pagán-, ha quedado pendiente hasta que se dilucide el futuro de la obra vandalizada.

“Siempre teníamos en mente que este mural era como el inicio de una narrativa mucho más profunda, que en nuestro próximo mural iba a elaborarse mejor y estábamos bien motivadas. Ahora que esto sucede las cosas cambiaron. Tendríamos que reunirnos mejor y pensar para reaccionar de manera concisa”, señaló Rivera Cortés.