La reducción consistente que ha tenido la población de Puerto Rico por más de una década obliga a todos los sectores económicos del país a cambiar su paradigma de una sociedad que requiere más infraestructura y mayor cantidad de bienes y servicios a una de menor tamaño, donde lo importante será la calidad de la oferta y la atención de nuevas necesidades, afirmó este viernes el director del Instituto de Estadísticas de Puerto Rico, Mario Marazzi.

“Llevamos 10 años consecutivos hasta ahora en que la población se ha reducido. Se ha reducido en un 7% desde su nivel más alto que fue en el 2004 y eso representa 300,000 seres humanos menos en este país que los que había en el 2004”, sostuvo ante la Cumbre de la Industria de la Construcción. 

Esta reducción en población, agregó el experto, parece que está teniendo un impacto directo en nuestra economía. Relató que en un estudio que hizo el Instituto para el Banco Popular “concluimos que la tasa de crecimiento de la economía y la tasa de crecimiento de la población tenían una interesante relación”.

Expresó que dicha conclusión es evidente ante el hecho de que cuando hay menos humanos, hay menos economía. “Nosotros concluimos que el 25% de la recesión -hasta ese momento- se debía a que había menos seres humanos en nuestro país”, dijo.

Marazzi recordó que en los años previos a conocerse este patrón de reducción poblacional “era el mundo en el que sabíamos que el año siguiente necesitaríamos más carreteras, que Hacienda iba a tener más contribuyentes, los partidos iban a tener más votantes, las escuelas iban a tener más estudiantes”.

Ese dato, refiriéndose a la población, “subía todos los años y era la constatación fehaciente de que necesitábamos más viviendas, más edificios, más centros comerciales, más hospitales, más escuelas. Ese fue el mundo en la que la mayoría de nosotros nacimos y nos criamos. Todo ese paradigma ha cambiado y nuestro país no se dio cuenta con la velocidad que debería haberse dado cuenta”, recalcó. 

“En diciembre 2010 nos dieron una noticia dramática, los estimados poblacionales que venía haciendo el Negociado del Censo federal estaban mal y estaban mal por una discrepancia grande. La población no había continuado creciendo como se había pensado toda la década, sino que había bajado”, señaló.

El director del Instituto atribuyó ese descenso poblacional a una merma en la tasa de nacimientos en el país y un incremento en la migración. 

“Hay una reducción dramática en el número de nacimientos que viene ocurriendo desde los 70, y este es un patrón que viene ocurriendo en todo el mundo industrializado. En el 2013, menos de 10,000 personas nacieron más que el número de las que murieron. Cuando eso lo atamos a la estadística de migración, y en el movimiento neto migratorio andamos entre 30,000 a 40,000 negativos, vemos que se está reduciendo por menos nacimientos y el aumento en la migración”.

El experto concluyó que “el paradigma anterior era el de más cantidad. El nuevo paradigma ya no es más cantidad, es más calidad. Podemos decirle esto a casi todos los sectores pero es aún más importante para el sector de construcción”, dijo a su audiencia de empresarios de esa industria.

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