El diferendo entre el gobernador Ricardo Rosselló y el presidente del Senado, Thomas Rivera Schatz por la Ley 80 sobre el despido injustificado en el empleo público y privado subió de tono ayer durante el mensaje de presupuesto para el año fiscal 2018-2019 que dirigió el mandatario a las Cámaras Legislativas.

El Gobernador aprovechó su mensaje a la Legislatura para advertirle a su delegación novoprogresista que como parte del acuerdo que alcanzó con la Junta de Supervisión Fiscal (JSF) “se hace necesario legislar para dejar sin efecto la Ley 80”.

“Ustedes conocen todo lo que está en riesgo”, les advirtió Rosselló en el discurso de 35 minutos en el que repitió medidas e iniciativas ya anunciadas como la millonaria asignación de fondos federales del Programa Community Development Block Grants, aumentos salariales de $1,500 anuales a los maestros y policías, las reformas educativa, contributiva y energética y la reducción a un 7% del IVU en los alimentos procesados.

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En el mensaje, Rosselló reclamó también haber reducido los gastos del gobierno en un 22 por ciento en comparación con el último presupuesto de la pasada administración de Alejandro García Padilla.

Rivera Schatz por su parte, se reafirmó en su rechazo a la propuesta de la JSF de derogar la Ley 80 y sentenció que “de ser necesario” irá a los tribunales.

“No le voy a enviar un mensaje a nadie de que no voy a defender mi punto en los tribunales. Si me toca defenderlo lo voy a defender porque es mi responsabilidad con los que me eligieron y así lo haré en el tribunal y en el foro que sea”, sostuvo.

“No siento ninguna presión, mi sentido de responsabilidad es con los que me eligieron. Yo no trabajo para la Junta”, añadió en declaraciones a periodistas en el Capitolio, luego de culminado el mensaje.

Rivera Schatz insistió en que la JSF no les ha proporcionado la información que le ha requerido de datos que sustenten la eliminación de la Ley 80.

Al ser preguntado si la Junta haría ajustes al presupuesto, el Presidente del Senado replicó que “si la Junta cree que tiene facultades más allá de las que le reconoce la ley Promesa que las ejerza, si cree que puede aprobar o derogar leyes que actúe”.

El presidente de la Cámara, Carlos “Johnny” Méndez sentenció a su vez, que no aprobará legislación “a ciegas”, pero volvió a cuestionar la efectividad de la Ley 80.

“La Ley 80 no da permanencia en el empleo, lo que da es una mesada por cada año trabajado”, indicó Méndez. “No le impongo mi punto a nadie, voy a analizar el proyecto y si no me han convencido no votaré a favor”, expresó.

No obstante, dijo que conoce de reuniones en las que alcaldes defendieron la propuesta de eliminación de la Ley 80. “Esas voces tienen que dar la cara también”, indicó el líder legislativo.

Al ser preguntado por el aumento de $27 millones en la partida presupuestaria de la Oficina del Gobernador, Rivera Schatz dijo que la política de austeridad tiene que ser en todos los lugares y los ajustes tienen que ser en todos los extremos. “Cada centavo tiene que tener una justificación, pero vamos a tener una sola vara”, dijo Rivera Schatz y añadió que no habrá “aumento ninguno” para la Asamblea Legislativa.

Para el senador independentista Juan Dalmau, el mensaje de Rosselló fue “un regaño de Estado” para los legisladores de la Palma. “Ahora veremos si los legisladores del PNP defienden a los trabajadores o si ceden ante el regaño del Gobernador. A ver si el gas pela y el apio es verdura”, expresó el legislador pipiolo en su cuenta de Twitter.

Mientras, el economista Juan Lara subrayó que el presupuesto que presentó el Gobernador a la Legislatura “ya estaba acordado” con la JSF, con excepción de la propuesta reducción de pensiones.

“Esa es la parte que tenemos que estar pendiente, de cómo la van a negociar. Ese es un tema que todavía está sobre la mesa”, sostuvo.

En cuanto a la Ley 80, el profesor de economía de la Universidad de Puerto Rico (UPR), indicó que “no sabemos qué va a pasar”.

Dijo que, en términos generales, va a haber recortes “significativos” en el gobierno y destacó que tanto el Gobernador como la JSF “están contando” con “una entrada” de fondos federales en los próximo tres a cuatro años que minimice el impacto de los ajustes fiscales.

“La economía va a tener que operar con un gobierno más pequeño y el golpe a la economía es suavizado por los fondos federales que van a estar entrando para proyectos de vivienda, carreteras y la reconstrucción del sistema eléctrico”, aseveró el economista.