Los embalses más afectados por la sequía que se registra en la mitad este de Puerto Rico -Carraízo, La Plata, Cidra y Patillas-, registraron descensos en sus niveles, en momentos en la que las oportunidades de que se reporten aguaceros ante el paso de una onda tropical por la zona casi se han desvanecido. 

La vaguada que se suponía ayudaría a la onda a traer más aguaceros está ubicada en un área al noroeste de la Isla que no favorece que la precipitación se mueva sobre tierra, explicó el meteorólogo David Sánchez, del Servicio Nacional de Meteorología (SNM). 

Modelos de radar muestran cómo las lluvias se han quedado esta mañana al sur de la Isla, en las aguas del mar Caribe. Sánchez indicó que el área de tronadas también se ha quedado sobre las aguas. 

“Va a llover más para el oeste” en horas de la tarde, afirmó. 

Como la mayoría de los sistemas que han pasado por la Isla, lo que podría dejar esta onda sobre la mitad este de Puerto Rico son aguaceros aislados. 

La próxima onda de camino a la Isla se espera para el martes de la próxima semana.

La mitad este de la Isla atraviesa desde mayo pasado una sequía, que por áreas es extrema, severa y moderada, según la ha catalogado el Monitor de Sequía de los Estados Unidos. El mayor efecto de esta sequía se ha hecho sentir en el descenso de los niveles de los embalses. 

Carraízo fue el embalse que mayor caída registró en el informe diario del nivel de los embalses publicado a las 5:00 a.m. de este jueves por la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados (AAA). Su baja fue de nueve centímetros. Permanece clasificado en “control” con 35.61 metros. 

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Los 160,000 clientes de Carraízo, en Carolina, Trujillo Alto, así como sectores de Canóvanas, San Juan y Gurabo, están en un plan de racionamiento de dos días sin servicio y un día con agua potable. 

Mientras, La Plata registró un leve descenso por segundo día consecutivo. Cayó solo dos centímetros, para permanecer en nivel de ajuste operacional con 38.08 metros. Estos ocho centímetros son los que le faltan para caer el nivel de control, aunque el embalse es tratado desde hace semanas como si estuviese en esta clasificación tras implantarse un plan de racionamiento de 24 horas para clientes de Bayamón, Toa Alta, Toa Baja, Naranjito, Corozal, Cataño y una urbanización de Dorado. 

Otros de los embalses en niveles críticos, aunque no están en plan de racionamiento son Cidra y Patillas. Ambos están en nivel de ajuste operacional. 

En las pasadas horas, Cidra bajó un centímetro para ubicarse en 399.72 metros. Mientras, Patillas cayó cuatro centímetros. Están en 63.29 metros.

Cabe destacar que todos los embalses registraron descenso en un periodo de 24 horas. Los que están más cerca de caer a nivel de ajuste operacional son Toa Vaca, en Villalba, y Río Blanco, en Naguabo. 

Peligrosas las condiciones marítimas  

Ante el paso cercano de la onda tropical, el SNM ha activado varios boletines para exponer la peligrosidad que representa para los bañistas y operadores de pequeñas embarcaciones las aguas del océano Atlántico y del mar Caribe. 

A los bañistas se les recomienda no acudir a la playa Jobos, en Isabela, pues hay un riesgo alto de corrientes submarinas. Para el resto de las playas del norte y el sur se recomienda precaución por el riesgo moderado de resacas. 

Mientras, el SNM activó una advertencia para operadores de pequeñas embarcaciones para aguas mar afuera del mar Caribe y los pasajes de Anegadas y de la Mona. En estas zonas se reporta oleaje de hasta siete pies y vientos de hasta 20 nudos, con ráfagas más fuertes.

Para el océano Atlántico, se emitió un comunicado de precaución para los operadores de pequeñas embarcaciones por oleaje hasta cuatro pies.