Grisselle Santiago se cansó de esperar. Como muchos puertorriqueños que han visto pasar los días sin el servicio de energía eléctrica, tras el paso de la tormenta Earl, Santiago decidió hacer el gasto del apretado bolsillo y comprar un generador.

"Llevo cuatro días sin luz y tengo cuatro hijos… las neveras… necesito la electricidad", dijo Santiago, quien lleva sin el servicio desde lunes a las 9:00 de la mañana en el barrio Sonadora de Aguas Buenas.

Santiago salía con uno de los pocos generadores que quedaban en la tienda Home Depot de Montehiedra en Río Piedras.

"El movimiento ha sido bastante. Al ver la gran demanda de los clientes, nos comunicamos con los proveedores para que nos trajeran más generadores", indicó Shirley del Valle, gerente de operaciones de Home Depot en Montehiedra.

Todavía le quedaba algunos generadores de gasolina. Los que está en espera porque se terminaron fueron los que operan con gas propano.

Pero las ventas no se han limitado a generadores pequeños. La desesperación por la espera para que la Autoridad de Energía Eléctrica restablezca el servicio ha llevado a muchos a incurrir en gastos mayores invirtiendo en generadores para operar toda una casa y hasta comercios pequeños.

Miguel Vélez, gerente de la división de generadores de energía en RIMCO, hacía lo posible por agilizar el trámite de los generadores que le habían llegado a la zona franca ante la alta demanda. En dos días solamente había vendido casi 40 generadores de 12 kilos en adelante.

"Hemos estado aquí como si fuera un huracán aquí adentro", dijo Vélez, quien comparó la demanda con la surgida después del paso del huracán Hortensia en 1996. "Hemos atendido de cliente a cliente y ya se nos han acabado varios modelos".