TAN PRONTO como este verano, el municipio guayanillense tendría una contestación final del Cuerpo de Ingenieros del Ejército de los Estados Unidos (USACE, por sus siglas en Inglés), para iniciar las próximas fases del proyecto de canalización del Río Guayanilla. 

Recientemente el ente federal visitó ese pueblo para inspeccionar las áreas por las que se desplaza el caudaloso cuerpo de agua que afectó seriamente a miles de personas durante el paso del huracán María.

Para el alcalde Nelson Torres Yordán, la respuesta estaría materializándose para este verano, a juzgar por el interés demostrado por Efraín Milán, jefe de proyectos del Distrito de Jacksonville del USACE.

“Ellos dicen que tenemos un 99.9% de probabilidad de que el proyecto (de canalización) se dé y eso sería para el estudio que es la primera asignación de fondos”, manifestó Torres Yordán.

Según el alcalde, la primera fase del estudio se hizo durante la administración gubernamental de Sila Calderón.

“Se basa en el estudio de 1986 cuando el Congreso autorizó al Cuerpo de Ingenieros a realizar un estudio pero no se le había asignado fondos. Se hizo un primer estudio con fondos del Departamento de Recursos Naturales, pero no se completó la segunda y tercera fase”, recordó.

El costo de este estudio estaría rondando los $3 millones y la canalización, que se completaría en unos cinco años, llegaría a los $60 millones en fondos federales.

“Los estudios pudieran tardarse de 1 año y medio a 3 años. La fase estimada de construcción es de 5 años”, señaló el Alcalde de Guayanilla.

Torres Yordán resaltó que las conversaciones con el organismo federal comenzaron desde antes del paso del fenómeno atmosférico que agravó la situación en el pueblo ya que el río se salió dos veces en menos de 24 horas.

“Las inundaciones a causa del río afectó a todo el casco urbano del pueblo, incluyendo urbanizaciones Villa del Río, Santa Elena, Santa María. Se afectaron todos los negocios, el centro comercial tuvo pérdidas de millones de dólares, el hotel, la escuela Francisco Rodríguez López, los centros estatales, el Tribunal, la Casa Alcaldía, todo”, dijo.

El alcalde mencionó que hubo lugares donde se encontraron marcas de hasta 5 y 6 pies de agua. Entre estos, el supermercado Napo Vélez que aún permanece cerrado desde el huracán.

“Lo perdieron todo. Esperamos que pronto pueda reabrir ya sea él u otro supermercado porque está afectando la economía del pueblo”, destacó.

Mientras tanto, Guayanilla espera por la carta de aprobación que minimizaría el riesgo de inundaciones, de cara al comienzo de una nueva temporada de huracanes.