Una entrevista de trabajo llevó este jueves a Edna Rosaly a visitar la rediseñada tienda de ropa de segunda mano de la organización sin fines de lucro La Fondita de Jesús, en la avenida Fernández Juncos, en Santurce.

Tras encontrar una camisa y un pantalón de vestir, la mujer destacó lo “espectacular” que quedó la tienda tras la trasformación que realizó un grupo de estudiantes de la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Río Piedras.

“La ropa está bien bonita. Conseguí la ropa que necesitaba”, contó Rosaly, quien de hecho es participante de los servicios que ofrece la organización sin fines de lucro.

Por 20 años, la tienda llevaba el nombre de Cielito de Jesús. Pero, tras el remozamiento, el lugar ahora se le conocerá como La Percha 704.

Dos vitrinas con maniquíes vestidos con algunas de las piezas de ropa que se puede encontrar en la tienda es lo primero que se logra observa en el antiguo edificio que ocupan.

Ya adentro, la decoración le da un corte bohemio y muy sofisticado, lo que causa una impresión similar a la de estar en boutique. Sin embargo, allí la ropa no cuesta miles. Los compradores pagan entre 25 centavos a $7 por una pieza, explicó la coordinadora del programa voluntario y empresarial de La Fondita de Jesús, Vanessa Lugo.

Midelys Mesa, residente de Santurce, fue otra de las clientas que salió satisfecha, tras visitar la reinaugurada tienda. Llevaba dos bolsas repletas de ropa, en la que se destacaba una camisa azul, marca Fernando Pena.

“Yo siempre he venido aquí a comprar y esto ha sido un éxito, este cambio. Hay ropa buena y a buen precio”, subrayó la compradora.

De paso, pidió a la ciudadanía que acuda a la tienda a ayudar a La Fondita de Jesús.

Todo lo recaudado en ventas, según Lugo, se utiliza para comprar ropa interior y ampliar la oferta de servicios a las personas sin hogar que atienden en sus centros.

“Queremos atraer otro tipo de mercado, de Miramar, del Condado. Darnos a conocer, que lleguen a La Percha, que hay ropa buena, de calidad, a buen precio”, expuso.

Los cambios en la calidad de ropa y la transformación de la tienda estuvieron a cargo del grupo Enactus, de la UPR en Río Piedras. Este fue su proyecto anual para ayudar a la comunidad, explicó el presidente del grupo, Javier González Piñeiro.

“Nosotros como estudiantes nos hemos desarrollado, hemos aprendido a trabajar con la comunidad y a conectarnos con las personas sin hogar. Nos ha ayudado a crecer y hemos aprendido a montar un negocio”, afirmó el joven.

La profesora mentora del grupo, Lisa Nieves, por su parte, explicó que Enactus lanzó una convocatoria entre los 16 capítulos universitarios que lo componen para que sometieran soluciones a diversos problemas/áreas de oportunidad que tenía La Fondita De Jesús.

La Fondita de Jesús atiende tanto a hombres y mujeres sin hogar. Les provee diariamente alimentación y un lugar para el aseo personal y lavado de ropa. También da vivienda a sobre 50 personas.