Las comunidades aledañas al Caño Martín Peña: el barrio Caimito en Cupey, Barrio Obrero y el sector El Gandúl ambos en Santurce, son las zonas que requieren vigilancia especial ante la alta posibilidad de que se inunden con las lluvias asociadas a la tormenta tropical Erika.

La alcaldesa de San Juan, Carmen Yulín Cruz, dijo que asignó equipos de trabajo especiales en esas zonas para poder monitorear e intervenir en caso de que sea necesario.

Informó además que se están monitoreando múltiples sensores colocados hace cerca de un año en los sectores cercanas al Caño, que enviarán señales a la Oficina Municipal para el Manejo de Emergencias y Administración de Desastres cuando el agua llegue al punto de amenazar con inundar las zonas más bajas. De esa forma esperan poder actuar con rapidez y evitar desgracias.

La ejecutiva municipal indicó que otro de los mayores problemas que confrontan ante el descenso en la velocidad de traslación de Erika,  es que los aguaceros fuertes se registren en horas en que las personas no estarán tan pendientes.

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"Ha sido un fenómeno atmosférico voluntarioso. Cuando creemos que sabemos por dónde va, ella decide hacer otra cosa. El problema es que con el nuevo curso que ha tomado eso pone las bandas del noreste del sistema -que es donde está la mayor  cantidad de lluvia- justo en San Juan...La expectativa es que de madrugada, como a eso de las 2:00 o 3:00 de la mañana empiecen los vientos fuertes. Eso crea una situación bien difícil porque la gente está durmiendo cuando vienen los golpes de agua", alertó.

Por otro lado, Cruz señaló que hay 30 personas sin hogar refugiadas en Campo Alegre, hay otras 14 refugiadas en El Gandúl y dos más en Nuestra Gente. De igual forma, tres familias del Barrio La Perla en el Viejo San Juan pidieron trasladarse a un albergue.

También hay personal destacado toda la madrugada en el hogar de niños Casa Cuna en Puerta de Tierra.

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