“Educación comenzó a hacer presión para que abrieran la escuela sin estar lista”


A una semana del inicio del año escolar, bajo aparentes presiones y sin contar con las condiciones necesarias para operar,  la Escuela Edmundo Valle de Rio Grande comenzó a recibir estudiantes en el día de ayer.

Según una fuente de este diario, el Departamento de Educación (DE)  ha estado ejerciendo presión a los maestros para que la escuela receptora comience a recibir a los 460 estudiantes que forman parte de su matrícula, ya que cuentan con estudiantes que provienen de la escuela Rosa Bernard que fue cerrada. Pero, en el día de ayer solo 150 alumnos se presentaron a tomar sus clases.

“El Departamento comenzó a hacer presión porque teníamos que comenzar a recibir a los niños. Entonces, por temor de que nos cerraran la escuela, varios maestros comenzaron a llamar a los padres para que trajeran a los estudiantes. Algunos hasta les dijeron a los padres que les quitarían puntos de no asistir a la escuela”, confesó la persona de manera anónima.

Este movimiento de llamadas a los padres y la llegada de estudiantes al deteriorado plantel se dio desde el jueves de la pasada semana y aseguran que “entre jueves y viernes la matrícula fue como de 30 estudiantes nada más”.

Sin embargo, la escuela elemental presenta problemas de filtraciones en casi todos sus salones, además de averías en la trampa de grasa del comedor, los baños, las fuentes de agua, la cisterna y la iluminación de algunos salones.

“Los salones tienen filtraciones y están horribles, sobretodo los del quinto grado que están todos destruidos. Hay unos salones que tienen problemas de iluminación y, ¿cómo se van a dar clases así? Incluso, hay un salón en el que se escucha el sonido como de un corto circuito todo el día.  ¿Cómo vamos a decir que estamos aptos para recibir a los estudiantes.  El departamento no quiere que hablemos con la prensa, pero quién nos va a escuchar,” cuestionó la fuente?. 

“Desde hace varios años hay una situación con la trampa de grasa que tiene problema de aguas negras y a cada rato hay que estar suspendiendo clases porque las aguas negras salen por la pluma.  Los baños están horribles y las fuentes de agua no han sido instaladas. La cisterna perdió su tapa con el huracán y eso no lo han verificado y puede que tenga cucarachas y esa es el agua con la que se cocina”, detalló.

Según supo Primera Hora, luego de que se hiciera pública la situación que impedía la apertura de varias escuelas de la zona este, como es el caso de la Antera Rosado y Edmundo Valle en Rio Grande y la Guillermina Rosado en Loíza, el Departamento de Educación movió las brigadas de trabajo de la Edmundo Valle para enviarlas a otro plantel, dejando así a medias las labores en esta escuela.

“El Departamento de Educación y Edificios Públicos tienen a esta escuela en el olvido.  Empezaron a trabajar aquí y cuando salió en los medios,  nos quitaron las brigadas para que fueran a reparar la Escuela Antera Rosado. Ellos pudieron abrirla el 13 de agosto.  Luego, nos volvieron a quitar la brigada para llevárselas a la Escuela Guillermina Rosado y ahora ellos están listos para abrir y nosotros no”, detalló la persona entrevistada.

A su vez, la funcionaria del plantel explicó que, por ser una escuela receptora, la presión mediática por aún no haber abierto le ha jugado en contra, dada las intenciones de los padres de la escuela Rosa Bernard de que se mantenga operando su escuela que ya fue cerrada.

“Me sorprendió mucho lo que hizo WAPA, en vez de ayudar, vinieron a nuestra escuela con padres de la Escuela Rosa Bernard y no entraron a ver cómo estaban las cosas aquí.  A raíz de haberse hecho pública la situación en el plantel, le metieron tanta presión al Departamento de Educación que nos llevaron las brigadas y era como que tienen que abrir porque los de la Rosa Bernard están hablando”, sostuvo el contacto.

Mientras que el Departamento de Educación, negó que las brigadas de Edificios Públicos se hayan marchado de la escuela y confirmó que los trabajos están pendientes de realizarse, pero que es parte del plan de trabajo que Edificios Públicos discutió con el personal del plantel durante el día de ayer.

“No es cierto que las brigadas se han ido.  Hoy (ayer), Manuel Huertas de Edificios Públicos estuvo discutiendo con personal de la escuela parte del plan de trabajo que se está realizando en la reconstrucción de ese plantel.  Mientras que la Autoridad de Alimentos visitó la escuela y ya tienen una firma subcontratada que se hará cargo de la trampa de grasa”, explicó Alexi Ramos, portavoz de prensa del departamento.