“La realidad es que Puerto Rico está en una crisis y la última esperanza que le queda es Dios y un pueblo que salga de la depresión en la que está y se enfrente en la realidad”.

El reverendo Jorge Raschke, ministro de Asambleas de Dios, estaba ayer en oración horas antes del evento Clamor a Dios 2016, que se efectuará frente al Capitolio  y que este año buscará “poder preparar al pueblo para lo que estamos viviendo y lo que vamos a enfrentar, y cómo levantar la autoestima”.

Raschke celebra la edición 43  del evento con transmisión simultánea en 350 emisoras de radio y televisión a nivel mundial. 

Este año, para Raschke, el reto es mayor.

“Es un año eleccionario, estamos viviendo días muy duros con este revolú de Anaudi (Hernández, quien está declarando en un juicio por corrupción e inversionismo partidista en el tribunal federal) y la situación ha sido muy difícil.  Todo lo que hemos vivido en esta semana con lo de Anaudi creo que es una maldición que se va a convertir en una bendición, porque nos va a hacer sentir que no podemos confiar ciegamente de ningún liderato, el pueblo tiene que ser partícipe. Cuando uno se involucra, esas cosas se evitan”, insistió el religioso.

Sobre la actividad, que iniciará hoy a las 10:00 de la mañana, “gran parte del mensaje es que se entienda que hay que sentir el sufrimiento de la gente; la crisis nos ha afectado a todos, hay que impedir el abuso de poder de quienes gobiernan e impedir que siga sucediendo, porque el pueblo está perdiendo la confianza en las instituciones”.

“Daré un mensaje profético donde se señalan los males y cómo sobreponerse a esto”, adelantó.

Su discurso se centrará en la situación económica y política, así como en “algunas situaciones proféticas que tienen que ver con varios países, y siempre en este evento hay una revelación. Eso no lo puedo adelantar”, advirtió el reverendo.