¿Que queeé? ¿Cuántas?

Pues nada más y nada menos que 2.7 millones de libras de escombros y basura doméstica fue el saldo que dejó ayer la campaña de recogido que se realizó en el Municipio de Toa Baja.

Hoy, más de 250 voluntarios, incluyendo empleados de ese y otros municipios, continuaron con la tarea que busca dejar a Toa Baja, convertida ahora en un vertedero gigante, en una ciudad limpia y lista para dar la batalla contra los vertederos clandestinos.

Al momento, se han presentado 11 querellas contra personas que tiran escombros en áreas de ese Municipio.

“Este es el segundo día de iniciativa y ha sido espectacular el apoyo. Esta mañana, en el coliseo habían sobre 200 personas, y se ha dado un despliegue de equipo pesado por toda Toa Baja”, dijo el alcalde Bernardo “Betito” Márquez.

Durante el día de ayer se recogieron 536 toneladas de escombros y 696 de basura doméstica.

En algunos sectores han pasado cuatro semanas desde que no recogen la basura.

¿Sabía que su pueblo estaba tan sucio, tan arropa’o de basura?

“Sí. Nosotros veíamos ya esta situación. Dividimos a Toa Baja en cuatro regiones y comenzamos el impacto con la región norte y este… Lo que pasa es que esta área de Levittown (donde el alcalde estuvo hoy), que es el área norte, y Sabana Seca, que es noreste, no se había impactado. Pero sabíamos que había basura”, confesó al decir que ayer colabaron en el esfuerzo más de 175 personas, incluyendo a alcaldes como el de Corozal, Sergio Torres, que hoy también dijo presente, la de San Juan, Carmen Yulín Cruz; el de Aguadilla, Carlos Méndez; y el de Maricao, Gilberto Pérez.

En el caso de San Juan, Márquez dijo que la ejecutiva municipal estableció dos carpas, como centro de mando en el Centro de Gobierno de Toa Baja, para ayudar a su Municipio. “Ellos vienen, lunes, martes y miércoles”.

Algunos municipios como Bayamón, Río Grande, Arecibo y Comerío también enviaron brigadas.

Esta tarde, la alcaldesa de Gurabo, Rosachely Rivera, también llegó a apoyar el esfuerzo, y Guaynabo también llevó a su gente.

“Dentro de la dificultad hay que gozarse por la bondad. El mensaje más grande es que recojamos el espíritu de la solidaridad… Aquí hay alcaldes populares y penepés”, sostuvo el ejecutivo municipal que también tenía sus guantes para recoger escombros y desperdicios.

La solidaridad también contagió a decenas de voluntarios que se encargaron de preparar los alimentos que distribuyeron a los trabajadores.

Nereida Alicea estuvo a cargo del grupo de voluntarias del barrio Macún que prepararon 500 almuerzos que incluían, arroz blanco, habichuelas y pollo guisado.

“Guisamos 93 libras de pollo, 108 libras de arroz y 35 libras de habichuelas con patitas”, dijo Alicea quien agregó que vecinos y amigos donaron los alimentos, aunque la mayor parte la dió un comité que se dedica a ofrecer ayuda a la comunidad.

Prepararon 500 almuerzos que incluían, arroz blanco, habichuelas y pollo guisado. (Vanessa Serra Diaz)
Prepararon 500 almuerzos que incluían, arroz blanco, habichuelas y pollo guisado. (Vanessa Serra Diaz)

Empresas privadas también contribuyeron con el desayuno, jugo y agua.

El alcalde de Toa Baja declaró la semana pasada una situación de emergencia en su pueblo ante la crisis en el manejo de los desperdicios sólidos. Eso le permitió, además de recibir la solidaridad de otros municipios y de los propios toabajeños, el poder alquilar seis camiones para seguir resolviendo la situación.

Se espera que los trabajos se extiendan desde mañana hasta el próximo miércoles e impacten las áreas oeste y sur del municipio.

Se vislumbra que ese día lleguen ya los seis camiones nuevos que se alquilaron y que se unirán a los dos existentes. Márquez dijo que el Gobierno central, a través de la Administración de Desperdicios Sólidos, también prestará tres camiones por unos dos meses.

Precisamente, durante ese periodo, el alcalde de Toa Baja evaluará el cobro por el recogido de basura. Él siempre ha dicho que esa posibilidad es real.

“Esto me permitirá decidir si al final vamos a cobrar o no vamos a cobrar por la basura… Tengo que evaluarlo porque no puedo dejar que esto vuelva a caer a lo que hemos llegado”, sentenció.