Prepárese, pero no pierdala paciencia. 

El psicólogo Carlos Sosa recomendó a las y los ciudadanos que mantengan la calma antes, durante y después del paso de un huracán.

La ansiedad se apoderó ayer de cientos de ciudadanos que abarrotaron gasolineras y comercios luego de los primeros boletines gubernamentales tras emitirse una vigilancia de huracán para Puerto Rico advirtiendo que el fenómeno traería devastación a la isla, por lo que se hizo un llamado al desalojo de viviendas en áreas costeras e inundables.

El psicólogo calificó como fuera de lugar las expresiones del secretario del Departamento de Seguridad Pública (DSP), Héctor M. Pesquera, quien advirtió que si no se desalojaban los lugares de alto riesgo “van a morir”. 

El experto considera que este no es el momento de impartir pánico ni miedo porque se afecta la estabilidad emocional de las personas. 

“Comentarios que no abonan en nada, porque se supone que ahora mismo en una situación de crisis como la que estamos viviendo tratemos de mantener la calma y que seamos sensatos, conservadores. No nos tiremos a la calle como locos”, expresó Sosa sobre la ansiedad que impera tanto las carreteras como en los establecimientos.

El experto agregó que éste tipo de inestabilidad emocional lo que provoca es una conducta errática que podría degenerar hasta en violencia y eventos negativos que los ponen en riesgo. 

Es muy importante ser paciente, ejercer el autocontrol, ser solidarios con los demás, comprensivos y hacer ejercicios de respiración para relajarse, destacó. 

El psicólogo detalló que debe inhalar hasta llenar sus pulmones de oxígeno y luego lo va a soltar poco a poco por la boca y repetirlo tres a cuatro veces. 

“Yo estoy seguro de que vamos a seguir hacia adelante, que no vamos a quedarnos estancados. Esto lo vamos a superar como lo hemos superado en muchas ocasiones”, reflexionó.