Un tío del boricua que mantuvo por cerca de una década a tres mujeres en cautiverio en su residencia de Cleveland aseguró que la muerte del familiar no ofrece ningún indicio para entender su personalidad ni sus horribles actos. El suicidio de Ariel Castro, para su familia más cercana, cierra un capítulo que carecía de toda razón y humanidad.

Julio Castro, dueño de Caribe Glocery, en Cleveland, Ohio, tampoco se mostró sorprendido por la muerte, aunque aclaró que la noticia ha vuelto a poner el foco de los medios sobre su familia que no han dejado de llamar para entrevistas. “Nadie sabía lo que él tenía por dentro. Era una persona con una doble personalidad” , indicó Castro durante una entrevista telefónica con Primera Hora.

El comerciante indicó que la familia aún desconoce si reclamará el cuerpo del sujeto, quien se declaró culpable de 937 cargos de secuestro y violación por los actos de tortura que cometió contra Amanda Berry, Michelle Knight y Gina de Jesús. Mediante la admisión de culpabilidad, el sujeto se evitó un juicio de pena de muerte.

El dueño del colmado, quien en otras entrevistas pidió que todo el peso de la ley cayera contra su sobrino, indicó que su familia cercana ha intentado mantenerse fuerte mediante la oración. Entre los familiares de Ariel, un ex conductor de autobuses escolares, hay católicos y testigos de jehová. “Ha sido muy fuerte. He tenido que bregar con el media del mundo” , dijo.

¿Saben si recibirán el cuerpo?

“El cuerpo le pertenece al gobierno... No se hablado nada. Nosotros estábamos en el proceso de recuperarnos de la noticia del secuestro cuando ahora recibimos otro golpe (al revivirse la noticia de Castro por su suicidio)” , dijo.

Castro fue encontrado muerto en su celda en un centro correccional en Ohio el martes.