Llegada la adultez, cuando ya los hijos han crecido y a nivel profesional se han alcanzado grandes logros, un nuevo reto llega a la vida de muchos; me refiero al cuidado de los padres. Aunque no en todos los casos es necesario el que haya un cuidador con estos en otros casos es indispensable. Las alternativas para un buen cuidado a nuestros seres queridos es limitada, bien por el alto costo o por la carencia de personas entrenadas para esto.

Ante tal situación son los hijos y familiares los que asumen esta tarea. En algunas familias varios de sus miembros se dividen el tiempo pero en otras es mas difícil llegar a acuerdos razonables y justos. Esto trae como consecuencia, en algunos casos , discusiones y distanciamiento siendo los ancianos los que más sufren . Sufren al pensar que tienen la culpa de lo que sucede y que son una carga. En casos peores quedan solos, contando con la buena voluntad de vecinos u otras personas ya que la familia se ha desintegrado.

El cuidador primario llega el momento en que se agota física y emocionalmente trayendo lo que se conoce como el " Síndrome del Cuidador”.

Fernandez, 2021, indica que este síndrome se presenta en las personas que dedican una parte importante de su vida a los cuidados de una persona dependiente, como podría ser una persona en edad avanzada con Alzheimer, demencia senil o alguna patología que la obliga a depender de otra persona para sobrevivir, es decir que se encuentran en situación de dependencia.

Este síndrome, que pudiera parecer poco común, lo padecen un 85% de los cuidadores. Es por eso que se debe vigilar muy de cerca pues es probable que conozcamos a una persona cercana a nosotros que lo sufra.

Tanta puede llegar a ser la carga del cuidador que comience a abandonar el cuidado de su salud, se afecten sus relaciones sociales, familiares y llegue a la depresión.

Cuando se es un cuidador informal (familia del enfermo) las autoexigencias que en algunas ocasiones se autoimponen en el cuidado los puede llevar a frustrarse. Estos cuidadores se culpan si el paciente se enferma, si le sale una úlcera, si no mejoran. En ocasiones sus expectativas de recuperación son tan altas que van fuera de la realidad del cuadro clínico del enfermo.

Es importante que, el que cuida se cuide y pueda identificar cuando tanto a nivel físico como emocional no se esta bien.

¿Cómo saber si se esta atravesando por el Síndrome del Cuidador?

Cansancio constante.

Alteraciones del sueño.

Abandono total o parcial de sus cuidados básicos .

Falta de interés en disfrutar de nuevas experiencias o actividades que antes disfrutaba.

Frustración

Irritabilidad

Dolores sin explicación aparente.

Dolores físicos debido a uso excesivo de la fuerza para cargar, doblarse entre otras actividades.

Consumo de sustancias y/o alcohol.

Elevados niveles de ansiedad y estrés.

Episodios de llanto.

Aislamiento social.

Cuando una persona no se siente bien no puede cuidar a otra de la manera correcta. Es importante desarrollar destrezas de auto cuidado. Resulta a su vez importante el solicitar ayuda a otros familiares. Hay agencias gubernamentales que pueden ofrecerle apoyo con el paciente o envejecido al igual que orientación sobre sus derechos y responsabilidades de los otros miembros de la familia.

Recomendaciones:

Reconozca cuando ya se siente agotado , no se sienta culpable… usted es un ser humano.

Dedique tiempo para su salud física y emocional. Vaya al médico.

Dele la oportunidad a otros para que se involucren. A veces se piensa que solo uno lo puede hacer bien.

Considere la posibilidad de buscar cuidadores que hagan turnos rotativos. Hay opciones de cuidado fuera del hogar que ofrecen servicios excelentes, con medicos, cuidadores adiestrados y personal de enfermería.

Aprenda a decir NO.

Dedíquese tiempo para distraerse, para compartir con amigos y con familia . En ocasiones es tanto el tiempo que se dedica al cuidado que se es injusto con uno mismo y con otros miembros de su círculo.

Cuidado! Recuerde que puede llegar a sentirse ansioso y llegar a deprimirse. Si experimenta algún síntoma busque ayuda profesional.

Es gratificante poder darle calidad de vida a nuestros seres queridos. Para que lo podamos hacer de la mejor manera tenemos que tener a su vez calidad de vida y establecer limites para no llegar a estar agostados, quemados fisica y emocionalmente. Si el cuidador no se cuida serán entonces dos personas enfermas.