El orden de los cubiertos, el uso particular de cada uno, las servilletas, las características de cada plato y su función a la hora de comer... Así como cada uno de estos elementos tiene su fin en una mesa al momento de desayunar, almorzar o cenar, la Internet cuenta con sus reglas cuando de compartir contenido, convivir en los medios sociales y enviar un correo electrónico se trata.

Con los crecientes errores y comportamientos “que sacan por el techo” a los cibernautas en Internet en mente,  Jeanessa García, licenciada en relaciones públicas, presentó el Protocolo de Internet y redes sociales. 

El concepto “netiquette” que significa “netiqueta” fue presentado por García con el fin de educar y mejorar el comportamiento de los usuarios en línea. “Puerto Rico sigue creciendo y madurando en cuanto a tecnología, acceso a Internet a través de laptops, de teléfonos móviles y tabletas se refiere”, especificó. El estado actual de las redes sociales y el Internet en Puerto Rico continúa en crecimiento y abarcando cada vez a más personas por lo que a García no le faltaron ejemplos para mostrar las características de las buenas y malas conductas del ciberespacio local. 

El gigante de las redes sociales, Facebook, fue uno de los escenarios estudiados por García, quien también se destaca como bloguera en www.turelacionista.com. García dio “like” a las cuentas que humanizan las marcas, realizan buen servicio al cliente y establecen relaciones positivas con sus fanáticos. Tras presentar las semejanzas y diferencias de los grupos y las páginas de fans en Facebook añadió que la clave para mantener una cuenta exitosa radica en “fomentar la interacción”. Sin embargo, describió los “tags” innecesarios y a artículos y fotos que en los que no aparece como algunas de las cosas que “nos sacan por el techo” en Facebook. “Es una falta de respeto máxime si no estás en la foto, pero cuidado porque Facebook penaliza”, dijo.

Así también, incluyó que la continuidad es clave al momento de mantener activa una cuenta de Facebook. “Mensajes sin relevancia son peores que escribir nada”, añadió la también mantenedora del programa  de Internet y redes sociales “En vivo y Online” que se transmite los viernes en Radio Isla. Los juegos sociales también incomodan, según la relacionista, al igual que la inclusión de usuarios en grupos. Deben mantenerse las distancias personales y profesionales en los perfiles. García recomendó fomentar la discusión con la recién agregada funcionalidad para responder, limitar las promociones diarias y cuidarse de hastiar a la audiencia con exceso de fotos, vídeos y actualizaciones.

Mucho cuidado con Twitter

Un importante aspecto destacado por García fue la credibilidad de las personas que se relacionan en las redes sociales, sobre todo, en Twitter. Comunicadores y figuras públicas deben mantener sus precauciones y conservar sus reglas básicas de la profesión: dar crédito y fomentar la ética. De esta forma, García detalló que deben evitarse el exceso de hashtags o etiquetas, los enlaces cortos sin contenido y los tuits con mayor cantidad de caracteres permitidos. Igualmente incomodan las constantes peticiones para seguir a un usuario y compartir todos los aspectos personales en esta red. Los tuits a destiempo, el abandono de las cuentas y el “auto retweet” también fueron mencionados por García como parte de las fallas de los tuiteros. La relacionista recomendó conocer la jerga de Twitter, monitorear cuentas y colocar contenido relevante escrito de forma correcta en ellas.

El e-mail sigue vivo

“Es la primera puerta que nos da a conocer”. Aunque para algunos ya no sea parte de su diario vivir, García considera que el correo electrónico continúa formando parte importante de la presencia en Internet por lo que también ofreció reglas para su uso adecuado. Como regla general, la diferenciación de contenidos personales y profesionales es clave. “Para comunicarte con tu familia, uno le puede poner hasta brillo”, bromeó García. Sin embargo, cuando de profesionalismo se trata, deben considerarse el peso del archivo, los elementos que se incluyan en la firma, las personas copiadas en el mensaje y  hasta la forma y el contenido que se está enviando.  “No comparta nada que no compartiría en persona frente a conocidos y desconocidos”, puntualizó García, quien se prepara para su próxima presentación.