El grupo surcoreano Samsung Electronics solicitó ante una corte federal de San José, en California (EE.UU.), que se repita el juicio que le condenó a pagar a Apple 1.000 millones de dólares por apropiarse de tecnología patentada por la compañía del iPhone, informó hoy All Things Digital.

Samsung argumentó en los tribunales que tiene motivos para dudar de la imparcialidad del presidente del jurado, Velvin Hogan, quien ocultó al juez que había sido denunciado en 1993 por Seagate, una empresa que tiene a Samsung como uno de sus inversores principales.

A raíz de ese litigio Hogan tuvo que declararse en bancarrota y Samsung sospecha que esa circunstancia personal pudo influir sobre la decisión final del jurado.

Samsung señaló además que el abogado que representó a Seagate contra Hogan en su juicio está casado con un miembro del bufete Quinn Emanuel, que llevó la defensa de la compañía surcoreana en su causa frente a Apple.

Hogan alegó que durante el proceso de selección del jurado solo se le preguntó si había ido a juicio durante la última década, por lo que no se refirió a su pleito con Seagate.

A finales de septiembre Samsung realizó otra petición a la corte federal de San José para que se revisara la sentencia por violación de patentes por estimar que se le impusieron limitaciones en el número de testigos y en la duración de sus testimonios.

El pasado 24 de agosto ese tribunal californiano determinó que Samsung había violado seis patentes en tecnología y diseño de Apple, como el zoom táctil y la disposición de los iconos en la pantalla, y le condenó a pagar 1.000 millones de dólares, una de las mayores sanciones dictadas hasta ahora en este terreno.

Los dos principales fabricantes de teléfonos inteligentes del mundo mantienen desde 2011 una guerra legal con acusaciones cruzadas de violación de patentes, que ya acumula más de 50 demandas en una decena de países.

A pesar de ser rivales en el mercado de la telefonía, Apple y Samsung son también socios, ya que la empresa estadounidense utiliza componentes fabricados por la surcoreana para desarrollar sus dispositivos que produce en cadena en China.