Javier Mojica lo describe como una “locura”. David Huertas comprende bien el por qué Mojica lo describe así.

No es nada fácil lo que comienzan a vivir estos guerreros de los Vaqueros de Bayamón y los Capitanes de Arecibo, quienes hasta anteanoche estuvieron arrancándose los cantos en la serie final del BSN pero que desde hoy vuelven a ser compañeros en el Equipo Nacional, que anda preparándose para iniciar su participación en la segunda ronda del sistema de clasificación a la Copa del Mundo de la FIBA, China 2019.

Ambos hablaron con Primera Hora sobre ese cambio drástico de causas que tendrán que asumir desde hoy, cuando se sumen a las prácticas de la selección, que ayer tuvo el día libre.

Mojica, principal bujía de los Vaqueros en la final que está empatada a 2-2 y que por los dos partidos de la selección el 14 y 17 de este mes ante Panamá y Argentina entra en un receso hasta el 21 de septiembre, opinó que no será imposible cambiar la mentalidad y comenzar a ver a Huertas como compañero y no como rival. Para él será tan sencillo como “cambiarse la camiseta”.

“Sabemos que cuando es en el BSN vamos a matarnos en la cancha, a hacer lo posible para hacer ganar al equipo. Desde que estamos en el Equipo Nacional hemos llegado a ser amigos. Antes no nos caíamos bien. Era como una guerra, porque somos el mismo tipo de jugador”, dijo Mojica. “Pero es bien cool porque cuando es para representar a Puerto Rico estamos en la misma página, no hay egos, no hay nada personal, sabemos el esfuerzo que tenemos que dar y hasta ayer hablamos de lo que iba a suceder: la locura”, agregó.

Huertas coincidió que no será difícil cambiar la mentalidad a partir de hoy. Para él será más trabajoso dejar en pausa la final y caer en mentalidad de Selección, pero eso también es adaptable.

“Es un asunto más mental que otra cosa. Yo a Mojica lo respeto mucho. Llevamos como ocho o nueve años jugando frente a frente y no fue hasta este verano que jugamos por primera vez juntos en el Equipo Nacional. Ahora mismo estamos luchando por ser campeones cada uno, pero mañana la historia es otra cosa. Mañana cambiaremos el ‘chip’ porque vamos a jugar por una misma causa, a jugar por el País, que es lo que uno ama. Vamos a mover a un lado la rivalidad de esta final y desde hoy y hasta que termine el compromiso de la Selección voy a verlo como un compañero”, dijo Huertas.

La “locura” no terminará con el Equipo Nacional porque desde el 21 de septiembre en adelante ambos jugadores deben cambiar de camisetas nuevamente para completar la final del BSN.

“Luego ir con el Equipo Nacional y aprender nuevos sistema con Eddie Casiano, tenemos que regresar para batallar por el campeonato, que es el escenario más grande, aunque reconocemos la importante de la ventana FIBA. A Dios que nos ayude. Que nos dé energías y esfuerzo para representar la Isla y regresar con nuestros equipos”, dijo Mojica.