La quinceava (15va) exaltación de atletas y promotores del deporte del Salón de la Fama del Deporte Cayeyano, casa fundada en el 2002, se celebró en los pasados días, en una actividad dedicada a la gloria del baloncesto boricua José Rafael ‘Piculín’ Ortiz Rijos, se informó mediante comunicado de prensa.

La licenciada Gretchen Hau Irizarry, a nombre del alcalde de Cayey, Rolando Ortiz Velázquez, entregó un reconocimiento al también ocho veces campeón del Baloncesto Superior Nacional de Puerto Rico (1985, 1991, 1994, 1998, 1999, 2000, 2001, 2003).

“Hablar de Piculín Ortiz es repasar una extensa lista de logros en el baloncesto a nivel local y mundial, pero también es hablar de un magnífico ser humano que puso a Puerto Rico de pie para aplaudir unidos. Esa es su gloria más grande y emotiva, el tener el cariño y admiración de su gente dondequiera que esté”, expresó Hau Irizarry en la actividad celebrada en el Teatro Municipal de Cayey.

“Todos recordamos cuando Picu Ortiz jugó para los Utah Jazz mientras estuvo en la NBA, y para los Atléticos de San Germán, Cangrejeros de Santurce y Capitanes de Arecibo en el Baloncesto Superior Nacional, pero donde dejó al mundo entero con la boca abierta fue cuando estuvo en el Equipo Nacional de Puerto Rico que derrotó a los Estados Unidos en las Olimpiadas del 2004. Durante semanas en la Isla no se hablaba de otra cosa”, añadió la abogada.

El 26 de marzo de 2019, Piculín Ortiz fue exaltado al Salón de la fama del Baloncesto Internacional de la FIBA, logro que se suma su participación en cuatro Juegos Olímpicos (Seúl 1988, Barcelona 1992, Atlanta 1996 y Atenas 2004). Particularmente en los Juegos Olímpicos de Atlanta 1996, fue líder rebotero y segundo mejor anotador del torneo con promedios de 25 puntos y 10 rebotes por juego.

“En España firmó con el Real Madrid y en la ACB jugó también con el Barcelona, Festina Andorra y Unicaja Málaga. En todos esos lugares, Piculín dejó huella de su valía deportiva, pero sobre todo de su liderazgo y sus capacidades como ser humano y compañero. En Cayey estamos más que orgullosos de su labor”, finalizó Hau Irizarry.