Cleveland. Hay un gran vacío en la vida de Larry Nance Jr., quien no podrá llenarlo sin importar cuánto tiempo dedique a ver fútbol coreano, practicar yoga, ejercitarse en su bicicleta estacionaria o distraerse con los videojuegos.

El baloncesto es su vida.

La pandemia de COVID-19 ha desprovisto a Nance de una sus grandes pasiones y su profesión. Por ello, el pívot de los Cavaliers de Cleveland estaba agradecido de volver a una cancha real —aunque fuera durante poco tiempo.

Nance es uno de los pocos jugadores de la NBA que han podido ejercitarse después de que la liga dio permiso a los equipos de reabrir sus centros de entrenamiento, los cuales se mantuvieron cerrados casi dos meses debido a la pandemia de coronavirus.

La emergencia de salud llevó a suspender la temporada y ha puesto en duda su conclusión.

Nance regresó a las instalaciones de los Cavs el viernes. Durante dos horas, el jugador de 27 años se sintió en casa.

“Este es el periodo más largo sin jugar basquetbol en toda mi vida”, dijo el martes mediante una conferencia por Zoom.

Los Cavs y los Trail Blazers de Portland son los primeros equipos que reabrieron sus instalaciones la semana pasada para entrenamientos estructurados y voluntarios, restringidos a un jugador y entrenador por canasta. Más equipos tienen programado realizar entrenamientos mientras un mayor número de estados comienzan a relajar las restricciones que paralizaron los deportes en Estados Unidos.

Nance, quien reconoció que se realizó una prueba de coronavirus por el “pánico” en marzo, dijo que aunque las condiciones son surrealistas se sintió seguro de entrenar debido a la mascarilla y otras medidas de seguridad.

“Para mi esto me da una sensación de seguridad”, dijo sobre cubrirse la cara. “Tienes tus propias dos canastas, eso es todo. Tienes tu propio entrenador, que utiliza una máscara, y guantes que son exclusivos para ti. Incluso en el cuarto de pesas, levantas una pesa y si utilicé las 45 (libras), nadie más ese día tiene autorizado utilizar las 45 hasta que las limpien y las esterilicen, entonces para mi fue un buen régimen y me siento seguro de ir”.

La semana pasada, el comisionado de la NBA Adam Silver habló con los jugadores y les presentó algunos planes que ha considerado la liga para completar la temporada. Algunas de las opciones incluyen partidos sin aficionados o utilizar una sede centralizada —posiblemente en la Florida.