LA HABANA. Las Grandes Ligas de Béisbol, su asociación de jugadores y la Federación Cubana de Béisbol llegaron a un acuerdo que permitirá a los jugadores de la isla inscribir contratos de Grandes Ligas sin desertar, un esfuerzo por eliminar el peligroso tráfico que se había producido durante décadas.

El acuerdo, que se extiende hasta el 31 de octubre de 2021, permite a los cubanos firmar bajo reglas similares a las de los jugadores contratados en clubes de Japón, Corea del Sur y Taiwán.

Solo los jugadores bajo contrato con la federación cubana están cubiertos por el acuerdo, y la federación cubana acordó liberar a todos los jugadores mayores de 25 años con al menos seis años de experiencia profesional.

Serían clasificados como profesionales internacionales en virtud del contrato laboral de MLB y no estarían sujetos a grupos de bonificación de firmas de aficionados internacionales.

La federación cubana puede, a su discreción, liberar a los jugadores más jóvenes para firmar contratos de ligas menores con organizaciones de la MLB.

El Comisionado de las Grandes Ligas, Robert Manfred, se mostró feliz con el acuerdo.

“Por años, las Grandes Ligas hemos tratado de detener el tráfico humano de peloteros cubanos que es manejado por organizaciones criminales. Ahora hemos creado un mecanismo seguro y una alternativa real para que los jugadores puedan llegar a las Grandes Ligas”, dijo Manfred.

La historia del tráfico humano de peloteros cubanos es abundante. Los hermanos Liván y Orlando Hernández en el pasado, y más reciente Yasiel Puig, estuvieron hasta en peligro de muerte intentando salir de Cuba para poder firmar en las Grandes Ligas.