COOPERSTOWN, NUEVA YORK. En su carrera de 18 temporadas en las Grandes Ligas, Edgar Martínez tuvo muchos momentos memorables que atesora, ganó dos campeonatos de bateo, obtuvo cinco Bates de Plata, fue siete veces al Juego de Estrellas y existe un premio que lleva su nombre.

Pero sin titubear, aseguró que el que está al tope, es el que ocurrirá mañana cuando sea exaltado al Salón de la Fama del Béisbol.

“La exaltación es lo más importante. Definitivamente, este momento es el premio más grande como pelotero que uno puede recibir. Debido a eso es el más grande”, expresó el doradeño durante una rueda de prensa ayer a unas horas de que se convierta en el quinto puertorriqueño inmortalizado en Cooperstown uniéndose a Roberto Clemente, Orlando ‘Peruchín’ Cepeda, Roberto Alomar e Iván Rodríguez.

“Fueron 10 años, pero finalmente ya está llegando el momento. Ya mañana (hoy) es el día grande. Me siento muy bien, muy emocionado”, agregó Martínez quien tuvo que esperar una década en la boleta para ser seleccionado a Cooperstown debido a que un amplio sector de los cronistas con derecho al voto entendía que un pelotero que jugó la mayor parte de su carrera exclusivamente a la ofensiva, no merecía el máximo honor que ofrece este deporte. 

“Llegar hasta aquí vale mucho, ya que uno empieza a jugar en las pequeñas ligas… yo jugué en todas las ligas de Puerto Rico y uno jugando esas ligas, uno no se imagina nunca que este momento llegará y cuando llega uno piensa en todos esos años que jugó en Puerto Rico. Esto significa mucho”, dijo el ex jugador que desde el 2004 es honrado con el ‘Premio Edgar Martínez’ al mejor Bateador Designado en cada temporada.

(Hiram Torraca)
(Hiram Torraca)

Clemente fue su inspiración

Martínez expresó también su alegría ya que ahora estará por siempre junto a su ídolo de la infancia y motivación.

“Clemente fue el que me motivó a jugar béisbol. Yo vi los ‘highlights’ de la Serie Mundial de 1971 de ahí en adelante yo empecé a jugar béisbol, ahí vino la motivación. Por lo que significa Clemente para los puertorriqueños, por lo que hizo en el diamante y fuera del diamante, el que la placa mía esté al lado de la de él en el Salón de la Fama, es algo increíble y muy especial”, dijo Martínez quien en su carrera bateó para promedio de por vida de .312, segundo para un boricua detrás de Clemente quien bateó para .317.

La ceremonia de exaltación el domingo comenzará a la 1:30 p.m. y será televisada por MLB Network y WAPA Deportes. Además de Martínez serán exaltados Harold Baines, Mike Mussina, Lee Smith, Mariano Rivera y el fenecido Roy Halladay quien estará representado por su viuda Brandy. 

Sobre su discurso, que será en inglés y en español, Martínez expresó que aprovechará para agradecer a toda la gente que le ayudó en su carrera.

“El béisbol es sacrificado, uno sacrifica mucho y la familia sacrifica mucho. Mayormente será para dar las gracias a las personas que han ayudado a uno a través de los años. Eso va a ser la mayoría del discurso, las personas que me han ayudado”, sostuvo la leyenda de los Marineros de Seattle.

Entre esas personas a las que agradecerá será a su familia, que están aquí junto a él compartiendo este momento.

Además de su esposa e hijos, Martínez dijo que “aquí está el hermano mío Elliott, la mamá mía Cristina, mi hermana Sonia. Carmelo (ex pelotero) mi primo y como cinco o seis primos más, además de muchos amigos. Hay una larga lista de nombres”.

Aquí en Cooperstown, Martínez ya tuvo la oportunidad de compartir con Rodríguez, quien fue exaltado en el 2017, y este le aconsejó que se disfrutara el momento.

“Me dijo que estuviera tranquilo, que esto pasa rápido. Que después uno puede disfrutar Cooperstown todos los años que venga”.

Esta exaltación será histórica ya que será la primera vez que dos latinos son exaltados en la misma clase.  En el caso de Rivera se trata también del primer jugador seleccionado de forma unánime.

“Eso es algo que significa mucho para mí como puertorriqueño y como latino. Esperemos que siga creciendo y que vengan más latinos. Que dos entren juntos, es algo más grande todavía”, dijo Martínez, de quien Rivera se ha referido como el bateador más difícil que se enfrentó, como lo demuestran los 11 hits en 19 turnos que tuvo el boricua ante el panameño.

Con los cinco boricuas en Cooperstown, Puerto Rico es el país latinoamericano con más jugadores inmortalizados. Le sigue República Dominicana con tres (Juan Marichal, Pedro Martínez y Vladimir Guerrero), Panamá con dos (Rod Carew y Rivera) y Cuba (Tany Pérez) y Venezuela (Luis Aparicio) con uno cada uno

Pendiente a Puerto Rico

Sobre la crisis política que actualmente vive Puerto Rico, Martínez, quien reside en Seattle, dijo que se mantiene al tanto, pero se abstuvo de opinar.

“He estado poniendo atención de cerca y chequeando. Seguiré chequeando a ver cómo sigue. Esto no es el momento para dar opiniones, pero estoy chequeando”.