Nueva York. Major League Baseball adoptó su primer reloj de lanzamiento, límites en ajustes defensivos (’shift’) y bases más grandes para la próxima temporada en un esfuerzo por acortar la duración de los partidos e incrementar la ofensiva en un deporte ligado a la tradición.

La decisión sobre el reloj y las restricciones de ajustes defensivos por parte del comité de competencia de 11 integrantes se tomó el viernes pese a la oposición unánime de los peloteros del panel, quienes aprobaron el aumento del tamaño de las bases. El comisionado de ligas mayores Rob Manfred había promovido los cambios por mucho tiempo en un intento por combatir el incremento de tiempo muerto durante cuatro décadas y la asfixia de la ofensiva en la era de la analítica.

“Tanto las extensas pruebas en los últimos años como el personal de las ligas menores y una amplia gama de aficionados -desde los más leales hasta los seguidores casuales- han reconocido el impacto colectivo de estos cambios para hacer que el béisbol sea aún mejor y más divertido”, dijo Manfred en un comunicado.

Hasta finales del año pasado, Grandes Ligas necesitaba un aviso con un año de anticipación para realizar cambios en las reglas del juego sin la aprobación del sindicato de peloteros, el cual accedió en el acuerdo de cierre patronal de marzo establecer al comité, que incluye a seis representantes de la gerencia, cuatro jugadores y un umpire.

“Los jugadores viven el juego, día tras día. Las reglas y regulaciones en el campo afectan su preparación, rendimiento y, en última instancia, la integridad del juego en sí”, subrayó el sindicato en un comunicado. “Grandes Ligas no estuvo dispuesta a abordar de manera significativa las áreas de preocupación que plantearon los jugadores”.

El reloj de lanzamiento se establecerá en 15 segundos cuando no haya corredores en las bases y de 20 segundos con corredores, por encima del 14/19 probado en la categoría Triple A esta temporada y del 14/18 en niveles inferiores de ligas menores.

Habrá un máximo de dos de lo que Grandes Ligas llama desvinculaciones -tiros del pitcher a base o dejar de hacer contacto con la placa de lanzamiento- por turno en el plato, y se considerará un ‘balk’ a partir de la tercera desvinculación a menos que haya obtenido un out. El límite de desvinculaciones se restablecerá si un corredor avanza a la siguiente base.

Un receptor deberá estar en la caja del cátcher con nueve segundos restantes en el reloj y un bateador en la caja del bateo y enfocado en el lanzador con ocho segundos restantes. Las sanciones por infracciones serán una bola cantada contra un lanzador y un strike cantado contra un bateador.

Un bateador puede pedir tiempo a un umpire una vez por turno en el plato y después de eso se le otorgará sólo a discreción del umpire en caso de que la solicitud se haga ya estando en la caja de bateo.

El reloj ha ayudado a reducir el tiempo promedio de un partido de nueve entradas en ligas menores de 3:04 horas en 2021 a 2:38 esta temporada. El tiempo promedio de un juego de nueve entradas en ligas mayores este año es de 3:06; era de 2:46 en 1989, según Elias Sports Bureau.

El límite de ajustes de posiciones defensivos, o ‘shift’, establece que dos jugadores del cuadro deben estar a cada lado de la segunda base y que todos los jugadores del cuadro estén dentro del límite exterior del cuadro una vez que el pitcher esté sobre la placa de lanzamiento, y los jugadores del cuadro no pueden cambiar de lado a menos que haya una sustitución.

El tamaño de las bases aumentará de 15 a 18 pulgadas cuadradas, promoviendo la seguridad - los inicialistas tienen menos probabilidades de ser pisados, pero también impulsará el robo de bases y la ofensiva con una disminución de 4.5 pulgadas en la distancia entre la primera base y segunda, y segunda y tercera.