La mala sangre entre los bandos de Emmanuel “Manny” Rodríguez y Naoya Inoue casi alcanzó al punto de ebullición durante un encuentro en un gimnasio en Glasgow, Escocia.

William Cruz, entrenador principal de Rodríguez, relató a este medio el intercambio que tuvo el padre de Inoue mientras el púgil puertorriqueño realizaba una sesión de sombras para los medios de comunicación que están reportando los pormenores del combate que ocurrirá el sábado.

“Parece que la gente de Inoue está acostumbrada a que los rivales digan que le tienen miedo y no nos vamos a dejar intimidar”, dijo Cruz.

“Desde el principio nos percatamos que estaban mirando a Manny con una actitud desafiante. Inmediatamente hacen unos gestos para grabar Manny. Me acomodo dentro del ring frente a ellos y fue cuando prendieron una cámara porque se vio el flash. Bajo, pero antes de hacer cualquier cosa verifico que en efecto están grabando. Le bajé la mano y lo empujé”, compartió Cruz desde la sede del combate.

Acto seguido, se acercó un publicista y Cruz le indicó que el séquito de Inoue no podía grabara.

“Manny fue el primero en hacer el entrenamiento. Nos quedamos para ver qué pasaba, pero Inoue no entraba. No llegó. Cuando decidimos irnos a la guagua fue cuando entró al gimnasio”, recordó Cruz.

“Eso fue para la prensa, no para que el entrenador coja el celular porque estoy seguro de que no era para algo bueno. Puede usarlo en contra de mi peleador y lo tengo que proteger”, agregó.

Cruz aseguró que su protegido no se percató de la situación y tampoco le afectará al momento del combate.

“Manny ni se dio cuenta de lo que pasó. Se enteró después. Es que no tenía que grabar a Manny, no fue un montaje ni para intimidarlos. No vinimos a jugar, vinimos a una guerra”, concluyó.