Durante siete asaltos la noche del sábado en Filadelifa, Danny García (32-0, 18 nocauts) tuvo una sesión de guanteo glorificado con Samuel Vargas (25-2-1, 13 nocauts), venciendo al colombiano por nocaut técnico tras siete asaltos disparejos pero incoloros. 

El fin vino a los 2:17 del séptimo capítulo en este combate no titular que extendió la racha de victorias de García.

Con el triunfo, García –campeón 147 libras del Consejo Mundial de Boxeo (CMB)- allanó el camino para su pleito unificatorio con Keith Thurman pactado para el próximo 4 de marzo. Thurman, quien estaba en ring side como parte del equipo de comentaristas televisivos, es el titular de la Asociación Mundial de Boxeo en ese peso.

Vargas abrió atacando el cuerpo con osadía, sin respeto para el peleador local. García le hizo pagar con una izquierda en contragolpe también abajo. Poco después, conectó parcialmente una derecha volada. Faltando 1:05 por transcurrir en el primero, Danny volvió a usar bien su izquierda arriba, paralizando a Vargas. En los 30 segundos finales, intercambiaron en el centro del ring.

Vargas visitó la lona a finales del segundo, cortesía de una derecha de García que detonó en su rostro.

García mostró su naturaleza de contragolpista en el tercero. En ocasiones presionó a un Vargas obviamente fuera de su liga. Pero la mayor parte del tiempo buscó la riposta.

En el round cuatro ya Vargas apenas tiraba y García tomó la batuta ofensiva jabeando y buscando llegar al cuerpo. Vargas atacó en el segundo minuto del capítulo y atacó  a los planos bajos. García lo recibió con varias izquierdas.

Un reanimado Vargas salió a atacar en el quinto. García evadía con facilidad pero no había urgencia en su boxeo. Coló una buena derecha al cuerpo, luego otra al rostro. Ambas sacudieron a Vargas. Pero el invicto campeón boricua no buscó el jaque mate. Ni siquiera el pelear ante su gente lo motivó a ponerle punto de exclamación a la pelea.

En el sexto, un pasivo Danny trabajó su boxeo defensivo y movimientos de torso, evadiendo con relativa comodidad los golpes de Vargas. Al final del capítulo acorraló contra las sogas a su contrario, pero no intentó rematar. Cerró con una buena derecha.

Vargas amarraba mucho a Danny en el siete y el campeón lo tiró al suelo algo molesto. Poco después, García pegó varios golpes y Vargas se dio a la huída. Aunque seguía de pie y no estaba lastimado, la pelea era tan desigual que la esquina de Vargas se subió a la falda del ring agitando una toalla blanca, en señal de rendición.

Increíblemente, tras una demostración en realidad deslucida, García y su padre, Ángel, fueron al lado del ring donde Thurman hacía de comentarista y comenzaron a arrojarle retos al campeón welter de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB).

“Hey Fili, si me quieren ver patearle el trasero a este tipo, ¡Hagan ruido!”, exclamó García cuando Thurman subió al ring.

Luego de un careo frente a frente, los campeones fueron separados.

La pelea fue transmitida a Estados Unidos por Spike TV.