Orlando “el Fenómeno” Cruz no subirá al ring  bajo la premisa de que vencer a Terry Flanagan sería una sorpresa. Sus expectativas son  que finalmente saciará    la ilusión de ser campeón mundial.

“Se hará el trabajo y estoy seguro que me uniré a los otros puertorriqueños que han sido campeones”, aseguró Cruz ayer a Primera Hora en entrevista telefónica  desde Cardiff, Gales.

La encomienda del púgil de 35 años no será sencilla, pues  estará en  desventaja en estatura y alcance.  Sin embargo,  nada de eso parece preocuparle. 

 “Estoy sumamente tranquilo. Se hizo un trabajo en el gimnasio y lo que corresponde es poner en práctica durante la pelea lo que ensayamos”, explicó Cruz, quien ayer marcó 134.8 libras durante el pesaje oficial. 

El campeón Flanagan también detuvo la báscula en 134.8 libras.

La estrategia  del entrenador  Juan de León era, precisamente,  que Cruz estuviera bajo en peso al momento de pisar la báscula.  

“Orlando se levantó liviano,  desayunó y se hidrató durante el día. Sabemos que Flanagan es alto y corpulento, por ello, queríamos que Orlando viniera bajito. Siguió al pie de la letra el programa de alimentación. No tuvo ese sufrimiento para hacer el  peso”, compartió De León.

“Por lo que pude escuchar, Flanagan dijo que piensa  que Orlando irá a   poner presión y  que intentará sacar a Orlando en cuatro asaltos. Nos tendremos que cuidar  los primeros  asaltos para luego tratar de meter las manos”, compartió.

Persigue su lugar

Cruz, por otro lado, aseveró que no le interesa  que su vida personal sobrepese los logros deportivos.           

 “El mundo sabe que soy gay y eso me quitó un peso de encima. Quiero que me reconozcan  porque soy un buen atleta que sale  a morir en la raya cuando representa a Puerto Rico”, sostuvo. “No me interesa que se siga revolcando que soy gay. Soy una persona que siempre ha dicho que  será el próximo campeón munddial”, concluyó Cruz.