MIAMI. Los eventos de gran magnitud como el Super Bowl, que atraen a decenas de miles de personas, se han convertido en ejes para el tráfico sexual, y las autoridades de Miami dijeron el miércoles que están decididas a erradicar este delito en las actividades relacionadas con el gran partido de la NFL.

Funcionarios policiales locales y federales lanzaron una iniciativa encaminada a generar conciencia del problema, e intentan que los ciudadanos reporten presuntas actividades de tráfico sexual, que con frecuencia involucran a niños incluso de 12 años.

El Super Bowl se disputará el 2 de febrero en el estadio Hard Rock en Miami Gardens, pero no se realiza aisladamente, ya que está acompañado por decenas de eventos con ambiente de fiesta, los cuales presentan oportunidades de tráfico sexual y prostitución.

“No vamos a tolerar la explotación sexual de nuestros niños ni de nuestra juventud”, declaró Katherine Fernandez Rundle, fiscal estatal en el condado Miami-Dade, durante una conferencia de prensa. “Realmente estamos listos para impedir esto”.

La iniciativa de Miami incluirá anuncios, entre ellos un afiche de un “tipo siniestro” con las palabras: “Compra Sexo. Serás Expuesto”. Ese y otros anuncios aparecerán en autobuses, en las redes sociales, en vallas publicitarias, en estaciones de transporte público y en muchos otros lugares.

El plan incluye una línea telefónica abierta las 24 horas a la que la gente puede llamar o enviar mensajes de texto para reportar comportamientos sospechosos: 305-FIX-STOP.

“El tráfico sexual es un gran problema”, dijo Ariana Fajardo Orshan, fiscal federal de Miami. “Vamos a perseguir los casos más difíciles”.

Las autoridades dicen que el condado Miami-Dade encabeza el tráfico sexual en Florida, que a su vez está en el tercer lugar del país. Alrededor del 40% de las víctimas son menores de edad, y la mayor parte del resto son adultos jóvenes de entre 18 y 23 años.

Kathy Andersen, directora ejecutiva del organismo activista The Women’s Fund Miami-Dade, dijo que el tráfico sexual es un problema crónico, y el Super Bowl ayuda a que tenga más atención.

“El Super Bowl hace algo por nosotros: nos da una plataforma para hacer ruido”, señaló. “Esto es sólo el principio”.