FOXBOROUGH, MASSACHUSSETS.  Bill Belichick no se inmuta por el pasado de Antonio Brown.

Y menos cuando gente ajena a los Patriots pone en entredicho si Brown encajará en el engranaje de Nueva Inglaterra sin causar problemas.

Eso obedece a que recuerda haber escuchado lo mismo sobre otro polémico receptor que adquirieron hace más de una década.

“Es lo mismo que decías sobre Randy Moss cuando lo contratamos”, dijo Belichick el martes.

Moss, quien entró en conflicto con los cuerpos de entrenadores de Minnesota y Oakland antes de ser enviado a Nueva Inglaterra en 2007, prosperó con los Patriots. Fue la mayor amenaza en lo profundo del terreno de juego en la ofensiva de Tom Brady, además de conseguir la mayor cantidad de recepciones de touchdown en su carrera en una temporada con 23 y 1.493 yardas en camino a ganar los honores como All-Pro por cuarta y última vez en su trayectoria.

Brown viene de su sexta campaña consecutiva de 1.000 yardas, pero aún no ha estado en un equipo ganador del Super Bowl.

Aún está por verse qué tanto planean utilizarlo los Patriots esta semana, cuando visiten a su rival divisional Miami.

“Creemos que ayudará a nuestro equipo, pero hasta que comencemos a trabajar con él... y veamos exactamente cómo encaja todo y qué podemos desarrollar, tendremos que ver cómo funciona”, comentó Belichick.

Si bien los jugadores de Nueva Inglaterra aún no han practicado esta semana y oficialmente tuvieron libre el martes, Belichick aseguró que estaban “intercambiando información con (Brown), como lo haríamos con cualquier jugador nuevo”.

Una gran parte de ese proceso de aclimatación implicará pasar tiempo con el coordinador ofensivo Josh McDaniels, quien como Belichick, ha atestiguado la habilidad de Brown para explotar defensivas como miembro de los Steelers de Pittsburgh.

Pero McDaniels fue firme al decir que no cambiará nada sobre su enfoque para enviar las jugadas esta semana sólo porque Brown esté involucrado.

“Veremos cómo funciona mientras avanzamos, pero ciertamente siempre hemos tenido el mismo concepto en términos de nuestro juego por carrera, juego por pase, nuestra ofensiva en general”, señaló McDaniels.

Brady sostuvo al inicio de esta semana que si bien estaban “todos emocionados por tenerlo”, el arribo tardío de Brown le presenta el mismo desafío que los receivers Josh Gordon y Phillip Dorsett enfrentaron cuando se unieron al equipo.