La principal liga universitaria de los Estados Unidos, la NCAA, tomó hoy martes los primeros pasos hacia autorizar a sus atletas amateurs a poder recibir compensación económica basada en su fama, cuando la Junta de Gobierno del organismo votó unánimemente a favor de permitir que los deportistas “logren sacar beneficios económicos por el uso de sus nombres, imágenes y semejanzas.

La Junta de Gobierno de la liga más grande del deporte colegial, así como sus instituciones miembros todavía tienen que descubrir de qué manera van a permitir que los atletas generen ese tipo de ganancia mientras mantienen sus reglas para ser una liga de atletas no profesionales. Los directores de la NCAA, reunidos en Emory University en Atlanta, encomendaron a cada una de sus tres divisiones de competencia a crear de manera inmediata las reglas necesarias para poder tener el marco legal listo para enero del 2021.

El miembro de la Junta de Directores, Michael Drake, quien es presidente de Ohio State University, dijo que le NCAA ha reconocido que debe abrazar los cambios y modernizarse “para proveer la mejor experiencia posible a sus estudiantes-atletas”.

Pero abundó que esos cambios tendrán que venir con limitaciones.

“La Junta ha enfatizado que los cambios deben ser consistentes con los valores del deporte colegial y de la alta educación, y no pasar ahora a ver los estudiantes-atletas como empleados de las instituciones”, dijo Drake a The Associated Press.

Un grupo de administradores de la NCAA ha estado trabajando desde mayo en cómo encontrar forma en la que los atletas puedan recibid algún tipo de compensación por el uso de sus nombres, imágenes y semejanzas. El grupo liderado por el directo atlétco de Ohio State, Gene Smith, y por el comisionado de la Big East, Val Ackerman, presentó un reporte el martes a los presidentes de las universidades que conforman la Junta de Gobierno.

Smith y Ackerman destacaron una serie de principios y guías que ha sido endosadas por la Junta de Gobierno para ser seguidas por los miembros de la NCAA cuando vayan a establecer las reglas.

Estas son que se haga una distinción clara entre lo que es una oportunidad colegial y una profesional. También que la compensación no esté sujeta a participación o resultados deportivos. Y sobre todo que proteja el ambiente de reclutamientos y prohíba ofrecimientos sujetos a que un atleta decida permanecer o transferirse a una institución específica.

Algunos líderes del deporte colegial temen que abrir esa puerta a la compensación abrirá la puerta a la corrupción.

“Una de las cosas más distintivas del deporte colegial es el proceso de reclutamiento”, dijo el presidente de la NCAA, Mark Emmert a The Associated Press. “Toda la noción de tratar de mantener un terreno justo para todo es algo central aquí. Y el utilizar oportunidades de auspicios, de la manera que sea, para influenciar reclutamientos es algo que preocupa a todos”.