El suicidio de una niña de 15 años, que jugaba el club Kali Beach de San Juan, ha dejado consternada y preocupada la comunidad de coaches de Puerto Rico.

La jugadora se suicidó en la noche del miércoles, Día de la Navidad, en Cataño.

La situación desarrolló una conversación de coaches de voleibol de Puerto Rico con el fin de buscar medidas para detectar situaciones por las que atraviesan sus jugadoras y evitar acciones como la que tomó la niña voleibolista.

Uno de los que entró en el tema es Abdel Otero, el corozaleño que ha sido asistente de la Selección Nacional y que está activo en el voleibol de clubes y escolar.

Otero publicó en Facebook un potente mensaje dirigido a sus jugadoras.

“No importa cuánto haya pasado desde que te entrené. Si lo hago ahora o si solo fue una vez. Tal vez nunca lo he hecho. Quizás olvidé o pronuncié mal tu nombre, pero; no importa cuán viejos nos hagamos, siempre aquí estaré aunque sea para darte un abrazo”, escribió Otero.

Miles de niñas y niños juegan voleibol en Puerto Rico a nivel de clubes y escolar. Igualmente lo hacen en múltiples deportes.

Una coach que entró en el tema lo fue Grenda L. Rodríguez, quien es coach de Kali Beach Club. Rodríguez también envió un mensaje a sus juveniles jugadoras.

“La realidad es que esta noticia me ha tocado tanto que no he parado de pensar en mis jugadoras desde que me enteré. Solo espero que mis chicas sepan que siempre estaré allí para ella sin importar qué. Recuerden que el enemigo siempre querrá destruir todo lo bueno que tienes, pero eres más fuerte y puedes más que el enemigo. Díos nunca abandona a sus siervos, confía en él”, escribió en Facebook.

También se unió en la conversación el coach Miguel Rojas, quien es coach escolar y de clubes.

“Hay que contratar sicólogos deportivos para saber lo que tiene cada atleta y hay que reunir a las jugadoras para conocer, para indagar. Es bien importante tomar acción”, dijo Rojas a Primera Hora a modo de sugerencia.

Según el reporte de la policía, la niña que cometió el suicidio no dejó una nota. La noche del miércoles se quedó en su hogar mientras su madre y padrastro salieron del hogar para entregar unos regalos.