Los apoderado de las Changas de Naranjito y de las Criollas de Caguas fueron contenidos por otras personas el domingo porque discutieron luego del segundo juego de la serie final del Voleibol Superior, confirmó el director del torneo.

A preguntas de Primera Hora, el director del torneo, Picky Servera, confirmó que el apoderado de las Changas, Jorge Dávila, y su contraparte de las Criollas, Furiel Ramos, tuvieron una discusión posterior al segundo juego en la cancha Roger Mendoza de Caguas y se “pasaron un poco de la raya”.

Sobre el término que usó Servera de que los apoderados se “pasaron un poco de la raya”, Ramos dijo a Primera Hora que fue “de parte y parte”.

“Creo que para ser honesto que fue de parte y parte. Hice un comentario y el contestó con un insulto. Así no se puede, y luego sale la cuestión varonil de él. ¿Que me agité? Pues bueno, soy hombre sobre todas las cosas”, dijo Ramos.

Dávila, por su parte, dijo que hubo una intención de pelea en la discusión.

“En el tema de la discusión de mover la serie (a otra cancha), se caldió la discusión; nos cruzamos palabras y él vino para encima de mí con intención de agredirme. Inclusive me invitó a pelear fuera. Le dije que no peleo.

Dos testigos de dijeron a Primera Hora que hubo intención de pelear entre ambos apoderados. Servera negó que hubo intención de pelea.

Servera sí dijo que el estuvo fisicamente entre los dos apoderados durante el enfrentamiento.

La discusión comenzó en torno al uso de las canchas locales durante la serie final, según fuentes de Primera Hora. Tanto la cancha Gelito Ortega de Naranjito como la Mendoza de Caguas tienen capacidad de fanáticos que se aproxima a los 3,000 asientos.

Servera negó que la discusión giró en torno al uso de las canchas porque éstas fue acordadadas previo al inicio de la final. Reveló que cada equipo jugará en sus respectivas canchas y agregó que se moverían ambos al coliseo Roberto Clemente a partir del quinto juego.

El director del torneo dijo que no tiene que citar a los apoderados a una vista porque él fue testigo de lo ocurrido. Anoche dijo que analizaba la posibilidad de disciplinar a ambos administrativos.

Servera disciplinó en esta temporada a dirigentes y personal de equipo por enfrentamientos similares a los de ambos apoderados.

El apoderado de las Criollas agregó que su tema con la cancha de Naranjito es prevención. Reconoció que en el primer juego de la serie en Naranjito no hubo ningún incidente. Pero agregó que cualquier situación de peligro puede provocar avalanchas de gente tratando de salir de la instalación con poco espacio para salidas.

Dávila dijo, por su parte, que defender tenazmente mantener la serie en la Gelito Ortega no si no le dan una razón válida para sacarla de su instalación.