Lo que a lo lejos se puede apreciar como una pintoresca comunidad en las montañas de Naranjito, representa un verdadero dolor de cabeza diario para sus residentes.

Pues moverse de un lugar a otro en la icónica comunidad El Cerro, compuesta por las barriadas San Antonio, San Cristóbal, San Miguel y Monte Verde, es complicado.

“Si vas a tu residencia, allí no puedes hablar de llegar en carro, sino de subir y bajar escaleras. Y los accesos son difíciles, los callejones son incómodos y muchos tienen hoyos”, aseguró el alcalde Orlando Ortiz Chevres.

Estos escollos fueron confirmados por El Norte durante un recorrido por el lugar. Allí la líder comunitaria, Doris Serrano, contó que presentó una petición al Municipio motivada por la dificultad que representaba usar una empinada escalera cercana a Monte Verde. Y es que para no caerse en dicha estructura, además de una buena condición física, se debe tener un buen juego de pies.

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“Hace par de meses recogimos firmas y le presentamos la inquietud al alcalde porque necesitamos mejoras a las escaleras, los caminos, los pasamanos”, sostuvo Serrano, quien por 20 años subió y bajó escaleras para ir a trabajar, sin importar la condición del clima. Más hoy “bajo solo cuando es necesario, porque para subir, como soy asmática, me asfixio”.

La líder comunitaria, quien reside en el sector San Cristóbal, relató un incidente que tuvo con su fallecida hermana hace unos años mientras la ayudaba a bajar unas escaleras.

“Ella tuvo cáncer de ovario y un día yo la iba a bajar por aquí. Eso, a mí nunca se me olvida, porque ella no se quería ir, de aquí tampoco. Ella bajando las escaleras, bajo una llovizna para irle a dar quimioterapia, se me zafó de los brazos y aquí, (refiriéndose a unos escalones en particular) se me cayó. Yo gritando hasta que, gracias a Dios, llegaron dos personas que me ayudaron a levantarla. Me la colocaron en una silla y la bajamos”, describió de la comunidad que tiene menos acceso en las casas que quedan justo en el centro, en San Antonio.

“Si hay un fuego o una emergencia... Aquí, como no hay espacio para los carros en las casas, estos se ponen en ciertas calles, unos detrás de otros. ¿Qué pasaría si uno de los vecinos no aparece a tiempo para sacar el carro para que venga una ambulancia? Aquí hay personas mayores, hay niños y hasta nosotros los jóvenes (a manera de broma). Si tú vas a pasar una persona en camilla es muy difícil por estos callejones”, agregó Serrano.

Es por esto que la Administración Municipal de Naranjito gestiona al momento un proyecto que facilitaría los accesos en El Cerro. "Queremos asegurar no solo el mejorar la calidad de vida, sino que cuando las personas vayan a sus residencias lo hagan de forma más segura", puntualizó al Alcalde.

El trabajo de arreglos de infraestructura en El Cerro se necesita con premura debido a que la situación de los accesos se agrava con el factor edad, ya que la mayoría de su población ya es adulta mayor.

“El problema de esta comunidad es que prácticamente más del 60% de los residentes son personas mayores de 60 años de edad”, sostuvo Ortiz Chevres al dar detalles del proyecto basado en las necesidades presentadas por la comunidad cuya población sobrepasa las 200 personas y a quienes “lo más que les importaba era que se le mejoraran los accesos”.

Para estas personas de edad avanzada las tareas del diario vivir son toda una odisea en EL Cerro ya que incluso tienen que pagar para que les ayuden a subir hasta la compra a sus casas, según contó María Mercedes Morales, residente de San Antonio.

“Por estas escaleras yo me caí, ahí mismo. Me he caído como tres veces y estoy mal. Aquí no puede subir una ambulancia, no pueden subir los bomberos, no podemos traer compra. Por lo menos yo, tengo que pagar para todo, para cloro, pa' leche, para tó'”, sostuvo Morales, quien ha vivido en El Cerro toda su vida.

Precisamente, en una reunión reciente, el plan de mejoras fue presentado a personal de Rural Development.

“Le presentamos el proyecto y lo acogieron muy bien. Ellos conocen el área, conocen la comunidad. Así que, prácticamente, ya en espera de someter todos los documentos adicionales que nos solicitaron, para, digamos a finales de año, si todo sale como está planificado, podamos iniciar el proceso de mejoras”, estableció el líder municipal del proyecto en el que se invertirían unos $1.2 millones.

“Las mejoras en términos de acceso consistirán en arreglar las escaleras, pasamanos, los callejones, las pequeñas calles para que las ambulancias y servicios de emergencias puedan entrar. Construiremos buzones de correo postal, porque las personas no tienen apartados y tienen que caminar hasta el correo, lo que crea un problema mayor, también, en términos de la correspondencia. Vamos a establecer un área también para depositar los desperdicios sólidos y para depositar material reciclable. Así que es un proyecto, cuyo fin será mejorar la calidad de vida y proveerle seguridad a estos residentes cuando van hacia sus hogares”, indicó el alcalde.

Cabe destacar que el mandatario no está ajeno al estilo de vida en El Cerro, ya que “me crié en la barriada, cuando iba a casa de mi abuela. Mi abuela vive en la comunidad, familiares, amistades y sí, he visto el problema. Y, ahora, se dieron las condiciones y las probabilidades de lograr el financiamiento”.

De hecho, mientras Serrano caminaba por unas de las aceras -en ese momento afectada por un tubo roto de la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados del que habían hecho querella y no se había reparado aún- cercana a la casa de la abuela del Alcalde, aseguró que a “la abuelita es una que hay que bajarla con camilla, mire, allá abajito... A ese, yo lo vi correr por El Cerro. Él se crio aquí”.

Subir y bajar escaleras es común para los residentes, pero las mismas están en mal estado. (PARA EL NORTE / ALVIN J. BÁEZ)

Muchas áreas no son seguras para caminar. (PARA EL NORTE / ALVIN J. BÁEZ)