Dentro de las varias canciones que se encuentran en el soundtrack de "A Star is Born", "I'll Never Love Again" es la más dramática, tanto por lo que ocurre en la película como por la tragedia personal que vivió Lady Gaga horas antes de cantarla.

Lady Gaga le contó a la revista digital Mashable que cuando se disponía a grabar "I'll Never Love Again", tema que su personaje (Ally) canta al final del filme, recibió una llamada telefónica.

Le informaban que una de sus mejores amigas, Sonja Durham, paciente de cáncer terminal, se había puesto muy enferma. Gaga dejó el estudio y se fue de inmediato a ver a su amiga, pero llegó tarde. Sonja había muerto 10 minutos antes.

Sin saber qué hacer, los allegados le pidieron que haga lo que Sonja hubiese querido.

"Ella me dio un regalo trágico ese día y me lo llevé al set y canté esa canción para Jackson y ella el mismo día", contó.

Lady Gaga resaltó que el día de la grabación Bradley Cooper fue muy bueno con ella y le dijo que no se esforzara si no se sentía bien. Pero ella continuó con su trabajo.

"La vida es difícil, pero debemos mantenernos juntos. ¿Qué importa más que la fama y los premios? Lo que importa es el proceso del amor y la bondad. Creo que la estrella de esta película es el coraje humano, la valentía", añadió.

Considerando las críticas positivas y recepción de la audiencia para "A Star is Born", no sorprendería que Lady Gaga sea nominada por este tema al Oscar en la categoría de Mejor canción original. La respuesta llegará en unos meses.