El entusiasmo y el calor del público boricua se hizo presente durante el estreno del esperado musical Hamilton en el Centro de Bellas Artes de San Juan la noche del viernes.

La reacción no fue casual teniendo en cuenta la gran expectativa después de meses de espera por ser espectadores de la obra musical más exitosa de Broadway.

No solo fue una noche para presenciar un gran espectáculo teatral, sino para abrazar con su apoyo la interpretación de actor Lin Manuel Miranda, quien nació en Nueva York, pero que promueve -siempre que puede- el amor por sus raíces puertorriqueñas.

Apenas se apagaron las luces, y los aplausos sonoros y los gritos del público dieron la bienvenida a la puesta en escena. Minutos después, la aparición de Lin-Manuel Miranda al centro del escenario, rodeado de parte del elenco, desató un efusivo recibimiento que culminó con una prolongada ovación de pie. El actor disfrutó del momento con una pausa, estático, mientras miraba fijamente al público.

El compromiso por cuidar cada detalle y ofrecer en suelo boricua la excelencia que ha llevado a la exitosa obra musical Hamilton a contar con las mejores críticas desde su estreno en 2015 en Nueva York, fue evidente en el debut de la producción en la Isla.

La escenografía vistosa, la calidad interpretativa de sus actores, la sincronía de las luces y el dinamismo de los bailes son solo algunos de los ingredientes que abonan a capturar la atención durante la pieza inspirada en la historia de Alexander Hamilton, un prócer de la independencia de Estados Unidos.

El musical estrenó en Puerto Rico con efusivo calor boricua.

La obra, que además de política integra asuntos de romance y peleas, marca el regreso del actor Lin-Manuel Miranda a la pieza, luego de dos años y medio de ausencia. 

Desde el anuncio de la puesta en escena en Puerto Rico, el también dramaturgo expresó en más de una ocasión su preocupación por lograr una impresión favorable al interpretar nuevamente al primer secretario del Tesoro de la nación estadounidense en este drama histórico que toma de base la biografía escrita por el historiador Ron Chernow en 2004.

Sin embargo, los constantes vítores en la Sala de Festivales Antonio Paoli marcó un regreso triunfal del actor al musical, escrito en inglés. Lin-Manuel Miranda logró impartir una marcada autoridad al personaje, y recrear el entusiasmo y la determinación de quien se presenta como un visionario. 

El elenco deslumbró a lo largo de las 2 horas y 45 minutos de la pieza teatral, que contó con un intermedio de 20 minutos. La proyección escénica y las coreografías complementan con armonía la energía del repertorio musical.

Tal como ha sido reseñado, uno de los elementos que sobresale es el uso, principalmente, del hip-hop, R&B y rap en la partitura para explorar una narrativa del siglo 18, lo que se ha resaltado desde su estreno en Estados Unidos por apartarse de los tradicionales ritmos de jazz, pop o balada como exclusivos para mostrar una historia. La destreza verbal del también ganador de premios Grammy, Tony y Pulitzer quedó evidenciada, una vez más, con la rima de sus líneas.

Durante el acto de reverencia, al final de la obra, el público permaneció de pie en agradecimiento. El actor no pudo evitar contener las lágrimas.

"Gracias Puerto Rico. Los milagros ocurren e hicieron que esta noche ocurriera", dijo emocionado, y agradeció a los responsables de la producción.

Posteriormente, su padre, Luis Miranda, asomó al escenario. "Les enseñé a mis hijos que patria y familia son las cosas más importantes en la vida. Traer Hamilton a Puerto Rico hace ambas cosas", expresó con una amplia sonrisa.

Momentos después de su discurso, el dramaturgo desenfundó una bandera de Puerto Rico, lo que provocó gritos y gran entusiasmo en los presentes.

Lin Manuel Miranda regresa a las tablas en suelo boricua.

La madre del actor, Luz Towns-Miranda, y su esposa, Vanessa Nadal, estuvieron entre los presentes como parte de la audiencia.

El comediante y presentador Jimmy Fallon llegó en horas tempranas de la tarde e interactuó por unos momentos con el público que hacía fila para entrar en los predios del CBA.

De la clase artística del País asistió el actor Braulio Castillo, hijo, la presentadora y actriz Miraida Chávez, el comentarista Jay Fonseca, el comediante Raymond Arrieta, la actriz Johana Rosaly y la animadora Alexandra Fuentes junto a su esposo David Bernier. También, la actriz Marilyn Pupo, la cantante Ednita Nazario y la Miss Universe 2001, Denise Quiñones.

La pieza teatral, que ha sido merecedora de 11 premios Tony, un Grammy al mejor musical y un Pulitzer a mejor drama, entre otros reconocimientos, realizará 23 funciones en el CBA, hasta el próximo 27 de enero.

La presentación en Puerto Rico representa la sexta producción de Hamilton, después de realizarla en varias ciudades de Estados Unidos (Chicago, Nueva York, Washington DC y San Francisco) y Londres.