El pasado fin de semana seguían las presentaciones de posibles candidatas a Miss Puerto Rico Universe. Me dicen que hay buenas candidatas: mientras más alternativas, mejor. Me dicen que la gente de Wapa llega con todo el entourage y es impresionante la selección. Eso es muy bueno. 

El que tengan en el equipo a la cotizada modelo Rosa Lourdes es una gran adquisición y al igual que ella no pasará desapercibida en la pasarela, pues de eso ella sí sabe. No están escatimando para tener el mejor talento para entrenar a las chicas. 

La llegada de Grace Fontecha ha sido otro gran acierto. La instructora ha entrenado a ganadoras de Miss Universe como Denise Quiñones, Dayana Mendoza y Alicia Machado, así como a chicas de Costa Rica, Canadá, Italia Bahamas (muchas de las que entraron a la final o semifinal de ese certamen) y a Stephanie del Valle, la pasada Miss Mundo. 

Mientras Denise va montando su equipo la vimos regia, hacía tiempo que no la veía tan contenta. Precisamente, la semana pasada cerró la presentación de la colección del diseñador Gustavo Arango en San Juan Moda. En vez de ir seria como desfilan las otras modelos, sonrió cuando le comentaron lo bella que estaba. Muy bien. Así que señores, la actitud de Denise de tirar la casa por la venta junto al equipo de Wapa es buen augurio de lo que viene para el Miss Universe Puerto Rico. Cojan palco.

No se cohíbe 

La cantante Ámbar no ha escatimado en nada. Durante la grabación del videoclip del tema No lo dejes caer, boricua tuve la oportunidad de compartir con su nuevo equipo de trabajo, incluyendo a Sara Soto, quien manejó la carrera de Gloria Trevi en los momentos más difíciles de la cantante. 

Contrató a uno de los mejores publicistas de México, el amigo Alberto Gómez, quien entre otras cosas ha tenido la tarea de lidiar con todo el lío de Marjorie de Souza y ha trabajado mucho con Lucía Méndez. Así que Ámbar tiene un publicista de divas. 

En dos o tres semanas se estrena el tema, un llamado a superarnos. Y de eso sabe Ámbar, quien perdió todo en su casa por el huracán, que le llevó puertas, ventanas y hasta un árbol centenario le rompió parte del techo. Pero a mal tiempo buena cara: “No lo dejes caer, boricua”.