Pasa hasta en las mejores familias, diría Carmen Salinas cuando condujo un talk show; la violencia doméstica no respeta nacionalidad, raza o condición social, y los últimos en caer en este problema son los actores Johnny Depp y Amber Heard, quienes están en un proceso de divorcio por esta causa.

Hay varios ejemplos en el medio artístico que han pasado por lo mismo y que no siempre tienen un final feliz.

Uno de los casos más sonados fue el de los cantantes Rihanna y Chris Brown, quienes tuvieron un violento encuentro una noche antes de los Grammy 2009, donde Riri tendría una participación y que por la golpiza que su novio le propinó en el auto, que tuvo como resultado un ojo morado, un labio roto y hematomas en varias partes del cuerpo, la intérprete la tuvo que cancelar.

En 2012 trataron de retomar su relación, pese a las críticas, pero ella de se dio cuenta que no lo podría hacer cambiar y finalmentelo dejó.

Tortuoso. Si de matrimonio tortuoso hablamos, el de Whitney Houston y Bobby Brown tienen un apartado especial. Se casaron en 1992 cuando la carrera de ella iba en franco ascenso, pero en realidad fue cuando comenzó el infierno de las drogas para la estrella; a su adicción fue inducida por su esposo, de quien se divorciaría en 2007; en el proceso, la violencia doméstica fue uno de los argumentos.

Aunque Whitney trató de rehabilitarse en tres ocasiones y retomar su carrera, no lo logró. Fue encontrada muerta en la bañera de su cuarto de hotel en en el año 2012; la causa fue ahogamiento accidental, pero encontraron restos de cocaína en su cuerpo.

El amor entre Charlie Sheen y Brooke Mueller estuvo plagado de peleas constantes y problemas de adicciones; la gota que derramó el vaso fue el encuentro violento que tuvieron en la Navidad de 2009, en la casa donde vacacionaban en Aspen, Colorado.

Mueller denunció que su esposo la inmovilizó en la cama y puso un cuchillo en su garganta, amenazando con matarla, y esto le costó al actor tres meses de libertad condicional y 60 días en rehabilitación. Después de su divorcio en 2010 y un álgida pelea por la custodia de sus gemelos Bob y Max, ella fue detenida por uso de drogas.

Aunque trató de rehabilitarse sin buenos resultados, perdió la custodia de sus hijos y él anunció el año pasado que era portador de VIH.

En México también se dan casos, el más sonado fue el de Radamés de Jesús y Yered Licona, La Wanders Lover.

Iniciaron una relación después de ser compañeros en el programa Guerra de chistes. La violencia entre ellos era constante; la situación se volvió insostenible cuando en agosto de 015 ella terminó con la nariz rota y los ojos morados en un hospital; después de muchos dimes y diretes, y una temporada en rehabilitación para él, para que aprendiera a manejar su irá, llegaron a un acuerdo por el bien de su hija Radha, él la visita pero nada más, ahora cada quien tiene una nueva pareja.

Kate del Castillo también sufrió violencia con el comentarista Luis García, con quien tuvo un matrimonio de 2001 a 2004; tres años después, ella confesó que vivió maltrato físico y emocional; el ex futbolista siempre lo negó. El fantasma de la violencia domestica ha seguido en sus relaciones a José Manuel

Figueroa, entre ellas la que tuvo con Ninel Conde. Constantemente se les veía pelear en lugares públicos, rompían y al poco tiempo se les veía de nueva cuenta de la mano; en 2006 terminan su relación por una infidelidad por parte de él. A partir de ahí ella se ha casado en dos ocasiones y tiene una exitosa carrera.