El propietario de la casa que inspiró a crear la ‘casita’ de la residencia del artista puertorriqueño Bad Bunny, que aparece en el cortometraje ‘Debí Tirar Más Fotos’, puso este miércoles una querella por daños contra el cantante y las compañías Rimas Entertainment, Move Concerts y A1 Productions.

El abogado Juan R. Dávila presentó la demanda del querellante Román Carrasco conocido como Don Román, de 84 años, y reclamó una compensación económica de al menos un millón de dólares por “daños emocionales y angustias mentales”, la invalidez de los contratos y el pago de los gastos judiciales.

Relacionadas

Don Ramón afirmó que firmó contratos en blanco sin conocer los términos concretos para permitir el uso de su propiedad ubicada en Humacao, un municipio en el este de Puerto Rico, en el vídeo que ya superó los 22 millones de reproducciones en la plataforma de Youtube.

“Funcionarios de los co-demandados requirieron la firma de Don Ramón en la pantalla en blanco de un teléfono celular. Dicho funcionarios transfirieron digitalmente, y de manera fraudulenta, la referida firma a dos contratos distintos”, esgrimió el documento judicial.

Asimismo, Carrasco aseguró que recibe visitas constantes de los fanáticos de Benito Antonio Martínez, nombre de pila del artista, y la imagen de su residencia se utiliza en redes sociales y él no obtiene ningún beneficio por ello.

“De inicio, estos contratos no fueron entregados a Don Román, no se le explicó ni se le leyó su contenido. El demandante tampoco los podía leer pues no posee tal habilidad”, reza la demanda.

La demanda subraya que el demandante “no busca dañar a Bad Bunny ni a las compañías, sino una compensación justa”.

Bad Bunny se prepara para la función especial el próximo sábado, que se transmitirá por Amazon Music, de su residencia ‘No me quiero ir de aquí’, que culminó oficialmente la víspera tras un récord de 30 conciertos.

Tras la residencia, iniciará la gira mundial ‘Debí tirar más fotos’, homónima de su último álbum, que comienza el 21 de noviembre en República Dominicana y concluye en Bélgica el 22 de julio de 2026, con más de dos millones y medio de entradas vendidas.