No hubo que decirlo, porque el mismo diseñador Joshuan Aponte reconoció que el majestuoso vestido típico de Madison Anderson es una reivindicación de su trabajo creativo.

Esto después del traspiés que tuvo el año pasado con el diseño que llevó Kiara Ortega al certamen Miss Universe, inspirado en el huracán María y el resurgimiento del pueblo puertorriqueño, y con el que, lamentablemente, se cayó en el escenario ya casi al terminar su desfile.

“Tenía una presión bien, bien grande encima, porque quería que todo el mundo se sintiera orgulloso, que ella se sintiera cómoda, honrar a la organización por haber dado esta otra oportunidad, y creo que lo hemos logrado”, expresó el diseñador.

Resultado de la presión que él mismo se generó, Aponte tuvo que confeccionar dos flores de maga. “Dentro de lo que pasó el año pasado con Kiara creo que empecé a cohibirme un poco, por irme a la segura, y en mi mente estaba en que no quiero se tropiece, y aguanté un poco en cuestión de tamaño, y cuando vinimos aquí, se veía hermosa y todo, pero el equipo de trabajo se sentó conmigo, y me dijeron, ‘Estás aquí por algo, y es porque nos gusta que sabes llevar las cosas a otro nivel’, y me dijeron, ‘Queremos que hagas la flor más grande’”.

El vestido inspirado en las riquezas naturales de Puerto Rico, especialmente la flor de maga y el coquí dorado, está elaborado con más de 200,000 piedras swarovski que fueron colocadas por 11 artesanos.

“Tenía cuatro diseños distintos y cuando vimos el coquí dorado y vimos a Madison inmediatamente tuvimos la pareación perfecta y otro dato curioso es que el coquí dorado está en peligro de extinción y por eso quisimos traerlo a la atención en esto. Ella es de aquí como el coquí, y al igual que el coquí puede vivir en otros países, pero no canta, ella encontró aquí su voz”, puntualizó el artista, con taller la ciudad de Chicago.

El trabajo del vestido típico fue posible, según resaltó, por el apoyo y auspicio del actor Pedro González.

“El pistilo fue la primera pieza que se comenzó a trabajar ocho meses atrás, porque se trabajó con un ingeniero y todo fue impreso en tres dimensiones en una máquina, y cada palo de polen se desmonta, detalló del vestido con el que la representante puertorriqueña deslumbró esta mañana en la presentación en el El San Juan Hotel.

“La flor fue hecha en telas muy ligeras para que represente esa frescura de las montañas puertorriqueñas y por eso la bañamos en cristales que le da ese efecto del rocío de la mañana”, continuó Aponte.

Una mejor apreciación del diseño se verá cuando Miss Universe Puerto Rico desfile por el escenario de la noche final del concurso internacional, el domingo 8 de diciembre, en Atlanta, Georgia, pues los pétalos de la flor toman un vuelo tipo mariposa.

No hubo que decirlo, porque el mismo diseñador Joshuan Aponte reconoció que el majestuoso vestido típico de Madison Anderson es una reivindicación de su trabajo creativo.

Esto después del traspiés que tuvo el año pasado con el diseño que llevó Kiara Ortega al certamen Miss Universe, inspirado en el huracán María y el resurgimiento del pueblo puertorriqueño, y con el que, lamentablemente, se cayó en el escenario ya casi al terminar su desfile.

“Tenía una presión bien, bien grande encima, porque quería que todo el mundo se sintiera orgulloso, que ella se sintiera cómoda, honrar a la organización por haber dado esta otra oportunidad, y creo que lo hemos logrado”, expresó el diseñador.

Resultado de la presión que él mismo se generó, Aponte tuvo que confeccionar dos flores de maga. “Dentro de lo que pasó el año pasado con Kiara creo que empecé a cohibirme un poco, por irme a la segura, y en mi mente estaba en que no quiero se tropiece, y aguanté un poco en cuestión de tamaño, y cuando vinimos aquí, se veía hermosa y todo, pero el equipo de trabajo se sentó conmigo, y me dijeron, ‘Estás aquí por algo, y es porque nos gusta que sabes llevar las cosas a otro nivel’, y me dijeron, ‘Queremos que hagas la flor más grande’”.

El vestido inspirado en las riquezas naturales de Puerto Rico, especialmente la flor de maga y el coquí dorado, está elaborado con más de 200,000 piedras swarovski que fueron colocadas por 11 artesanos.

“Tenía cuatro diseños distintos y cuando vimos el coquí dorado y vimos a Madison inmediatamente tuvimos la pareación perfecta y otro dato curioso es que el coquí dorado está en peligro de extinción y por eso quisimos traerlo a la atención en esto. Ella es de aquí como el coquí, y al igual que el coquí puede vivir en otros países, pero no canta, ella encontró aquí su voz”, puntualizó el artista, con taller la ciudad de Chicago.

El trabajo del vestido típico fue posible, según resaltó, por el apoyo y auspicio del actor Pedro González.

“El pistilo fue la primera pieza que se comenzó a trabajar ocho meses atrás, porque se trabajó con un ingeniero y todo fue impreso en tres dimensiones en una máquina, y cada palo de polen se desmonta, detalló del vestido con el que la representante puertorriqueña deslumbró esta mañana en la presentación en el El San Juan Hotel.

“La flor fue hecha en telas muy ligeras para que represente esa frescura de las montañas puertorriqueñas y por eso la bañamos en cristales que le da ese efecto del rocío de la mañana”, continuó Aponte.

Una mejor apreciación del diseño se verá cuando Miss Universe Puerto Rico desfile por el escenario de la noche final del concurso internacional, el domingo 8 de diciembre, en Atlanta, Georgia, pues los pétalos de la flor toman un vuelo tipo mariposa.