La increíble transformación de Kelly Osbourne
La celebridad asegura que está acostumbrándose a verse delgada.

Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 14 años.
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Muchos recordarán a Kelly Osbourne como la rebelde, pero muy divertida, hija del rockero inglés Ozzy. Su cabello rosa estridente, ropa estilo punk, maquillaje cargado y -cómo no- ese vocabulario florido plagado de palabrotas que la caracterizó en el reality de MTV The Osbournes (2002-2005) eran parte de su sello alocado, que ya a nadie parecía sorprender.
¿Otro rasgo que la distinguía? Su figura pasada de peso, que le ganó muchas críticas y burlas durante años en los tabloides de todo el mundo.
“Durante casi toda mi vida, la prensa me ha llamado gorda y fea. Entiendo que ser juzgada por otros viene con el territorio (de la fama), pero me partió el corazón y arruinó mi autoestima. Todo esto te prepara para odiarte enormemente”, confesó Kelly, de 26 años, a la revista estadounidense Shape en noviembre pasado.
Hoy día, sin embargo, la también cantante está sorprendiendo a todos con su nueva silueta. Gracias a una transformación completa en su estilo de vida -que incluye una rutina diaria de ejercicios y un régimen alimenticio saludable-, Kelly logró bajar casi 50 libras. Su cuerpo de 5’2 de estatura pasó así de la talla 14 a 2 (de 160 a 118 libras), un cambio más que drástico para la chica que una vez proclamó que nunca quisiera ser flaca.
Pero la británica está feliz con su delgada figura, que está muy lejos de la que muchos le recordaban. De hecho, ya Kelly le ha sacado provecho a su nueva imagen, pues se decidió a posar en un bikini rojo precisamente para Shape, que la eligió para su portada del mes de diciembre 2010.
“Nunca había usado un bikini en mi vida, ni siquiera había pensado en usar uno. Lloré cuando vi la foto”, relató al semanario US Magazine.
La estrella de realities aprovechó, además, su atractivo cuerpo para transformar su look por completo. Y es que, aunque aún sigue fiel a su estilo rockero, ahora la vemos con una imagen mucho más refinada y glamorosa dondequiera que se presenta: posando en la alfombra roja, sentada en la primera fila de los desfiles de moda, como comentarista en el programa Fashion Police de la cadena E!...
Aunque dramática, la transformación de Kelly ha sido un proceso gradual. Fue para otoño del 2009, durante su participación en la competencia Dancing with the Stars (ABC), cuando Kelly bajó 20 libras gracias a largas horas de práctica unidas a una dieta baja en carbohidratos.
Según cuenta ella misma, fue el programa lo que comenzó su nuevo régimen saludable, en especial por la ayuda que recibió de su compañero de baile (Louis van Amstel), quien le enseñó todo sobre nutrición.
“Él hizo que comiera hamburguesas de pavo y ensaladas y me explicó que una dieta alta en proteínas y baja en carbohidratos me mantendría con mucha energía. Entonces comencé a perder peso y entendí ‘es cierto lo que dicen: ¡una buena dieta y ejercicio en realidad funcionan!”, reveló a Shape.
Actualmente, Kelly se mantiene en un peso saludable midiendo sus porciones, haciendo Pilates, visitando el gimnasio regularmente y caminando por veredas empinadas (senderismo) junto a su entrenador personal.