En el mes de junio se presenta un suceso que varía conforme la región del mundo donde uno se encuentre. Se trata del día más largo del año. Una fecha que suele pasar desapercibida por muchos, pero para otras personas es sinónimo del comienzo de una “nueva etapa”.

En México, durante el día más largo del año la luz del sol ilumina aproximadamente 13 horas con 25 minutos, con ello se anuncia la llegada solsticio de verano.

¿Qué es el solsticio de verano?

El 20 de junio se despide la primavera y es el 21 del mismo mes cuando oficialmente comienza el verano. Pero, ¿cómo se produce la entrada a la temporada estival para el hemisferio norte?

Con el solsticio de verano, el eje norte-sur de la Tierra alcanza una inclinación de 23.4 grados hacia el Sol. Por lo anterior, se dice que el Polo Norte se sitúa más cerca del astro que el Polo Sur.

Muchas personas pueden tener la impresión de que el día dura más, debido a que el sol ilumina por mayor tiempo del habitual. En consecuencia, se percibe que la noche tiene menos horas.

De acuerdo con un artículo de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), la cantidad de luz que el hemisferio norte recibe del sol está determinada por la inclinación del eje de la Tierra. Esta es la principal razón por la que se genera el día más largo del año.

El solsticio de verano está rodeado de varias creencias y mitos de la cultura popular, como por ejemplo que el 21 de junio es más caluroso que el resto de los días del año, aunque esto tiene poca evidencia científica.

Asimismo, en algunas civilizaciones se suele dar la bienvenida al verano con celebraciones donde se busca promover la positividad, la energía, el movimiento y la alegría.