Las enfermedades autoinmunes se pueden describir como un autoataque del organismo. Pueden llegar a afectar el 5 por ciento de la población, y el número de casos nuevos por año puede ser superior a 20 por cada 100.000 habitantes. Además, por lo general están presentes más en mujeres que en hombres, explica Juan Manuel Anaya, director del Centro de Estudio de Enfermedades Autoinmunes (Crea) de la Universidad del Rosario.

Entre las enfermedades autoinmunes más conocidas están la esclerosis múltiple, que afecta el sistema nervioso central; el hipotiroidismo, la artritis reumatoide; el lupus eritematoso sistémico, que aqueja especialmente la piel, las articulaciones y los riñones; la diabetes tipo 1, que afecta el funcionamiento del páncreas en los niños, y el síndrome de Sjögren, que produce resequedad en las mucosas.

“Es como un enemigo interior porque el sistema inmunológico se confunde y ataca sin piedad al propio organismo, y si no se detectan tempranamente y se tratan de forma adecuada, podrían comprometer hasta la vida de quienes las padecen”, indica Anaya, quien es además miembro del foco ‘Ciencias de la vida y de la salud’ de la Misión de Sabios 2019.

En su calidad de investigador de estos temas, Anaya asegura que uno de cada tres pacientes con cualquier enfermedad autoinmune desarrolla una segunda y hasta una tercera patología de este tipo a lo largo de la vida, un fenómeno conocido como poliautoinmunidad y que permite inferir que estas comparten causas y mecanismos comunes bajo una teoría conocida como la ‘tautología autoinmune’.

Para conocer más de cerca estos males vale la pena hacer un recorrido de la mano de Anaya.

¿Por qué se producen estas enfermedades?

En todas, el sistema inmune, que cuida al organismo, lo ataca, generando daño. Este ataque es llevado a cabo principalmente por células del sistema inmune llamadas linfocitos y es promovido por la interacción entre factores hereditarios y medioambientales.

¿Cuáles son las más comunes entre los colombianos?

Son la tiroiditis autoinmune (en particular el hipotiroidismo), la artritis reumatoide (que afecta las articulaciones), el lupus eritematoso sistémico (que ataca múltiples órganos, en especial la piel, las articulaciones y los riñones), la diabetes tipo 1 (que perturba el funcionamiento del páncreas en los niños), el síndrome de Sjögren (que produce resequedad de mucosas) y la esclerosis múltiple (que se mete con el sistema nervioso central).

¿Qué síntomas tienen?

Pese a que los mecanismos que producen estos males son similares, los síntomas varían en función del órgano afectado. Así, cuando el sistema inmune afecta las articulaciones, el principal síntoma es el dolor articular inflamatorio en la mañana, acompañado de rigidez de las articulaciones. Si es el sistema nervioso central el afectado, en el caso de la esclerosis múltiple, los síntomas son visión doble o borrosa, problemas del habla, debilidad en miembros, pérdida de fuerza o de sensibilidad. En el caso del hipotiroidismo, los síntomas son sensación de frío, dolores musculares o articulares, piel reseca, ánimo triste. En el caso del síndrome de Sjögren, la sensación de ojo o boca seca. En todos los casos, la fatiga es un síntoma común a todas las enfermedades autoinmunes.

¿Por qué se producen estas enfermedades?

La causa no es una, sino varias. La interacción entre factores hereditarios de riesgo, que predominen sobre aquellos de protección, y factores medioambientales producirá una pérdida de la tolerancia para que el sistema inmune autoagreda el organismo. Tanto los factores de riesgo como los medioambientales son numerosos. Por eso, el estudio de estas enfermedades es complejo.

¿A quiénes afecta?

Principalmente, a las mujeres. Y esta afectación es mayor cuento más tardíamente aparezca la enfermedad. El primer mal autoinmune en aparecer es la diabetes infantil. El síndrome de Sjögren, que aparece hacia los 45 años de edad, afecta principalmente a las mujeres.

¿Son hereditarias?

Sí, pero los mecanismos exactos de esta herencia no se conocen completamente, dado que son enfermedades poligénicas, en las que decenas de genes intervienen tanto en el riesgo como en su protección. Así mismo, existen mecanismos que controlan el funcionamiento de los genes (mecanismos epigenéticos), que se heredan y también intervienen en el riesgo o protección de estas enfermedades.

¿Qué cuidados deben tener los afectados?

Varían de un paciente a otro. El estudio y tratamiento de las enfermedades autoinmunes han permitido la aplicación y difusión de la medicina personalizada, que hace que cada paciente sea evaluado y tratado según sus condiciones generales y particulares.