La muerte de 'George' es una gran pérdida para quienes lo cuidaron durante 14 años. Pero el fin de este caracol supone una importante pérdida también para la naturaleza. Y es que él era único. Se trataba del último ejemplar de su especie, con lo cual se concreta la primera especie extinta del 2019.

Su muerte ocurrió el pasado 1 de enero en la Universidad de Hawái, donde había vivido los últimos 14 años. Era especial. Ahora, ya no existen ejemplares de los caracoles Achatinella Apexfulva.

Tras estar varias décadas en peligro de extinción en la isla, en 1997 los últimos 10 ejemplares fueron llevados a la Universidad de Hawai. Pero todos ellos murieron por una enfermedad desconocida, además de las crías de estas. De ellas solo sobrevivió George. Se quedó solo.