La policía de Aurora, al este de Denver (Colorado), se ha puesto manos a la obra para identificar a los responsables de haber reemplazado el viernes pasado una bandera de Estados Unidos por otra mexicana en un centro de detención de indocumentados.

 Según informó este lunes a los medios locales el jefe de policía de Aurora, Nick Metz, sus uniformados no intervinieron el pasado 12 de julio durante la marcha en las inmediaciones de la cárcel privada de GEO Group porque "los estimados 2,000 manifestantes actuaron pacíficamente" y porque "no hubo violencia ni daños a la propiedad".

 Sin embargo, tras recibir denuncias contra los autores del cambio de banderas por "ingreso indebido a propiedad privada", la policía de Aurora usará los videos disponibles del evento para determinar la identidad de esas personas.

 De hecho, el pasado 19 de junio, luego de una pelea durante un encuentro de béisbol juvenil en Lakewood (al oeste de Denver), la policía de esa ciudad usó videos filmados por testigos para identificar, arrestar y presentar cargos contra los once principales implicados.

 En el caso de los sospechosos en Aurora, la acusación de "ingreso indebido" se debe a que el GEO Group había instalado una "barrera" (cadenas livianas de plástico con carteles "Prohibido Pasar") a la entrada del establecimiento como límite de distancia para los manifestantes.

 Los responsables por el cambio de las banderas ignoraron esa barrera y llegaron hasta los mástiles cercanos al edificio principal de la cárcel.

 Luego, cambiaron la bandera de Estados Unidos por una de México y las banderas de Colorado y del GEO Group por banderas con mensajes contra la policía.

 Un día después del incidente, el 13 de julio, el congresista Chip Roy, republicano de Texas, y otros republicanos reunidos en Denver para la Cumbre Conservadora del Oeste, presentaron "banderas de reemplazo" a la cárcel de GEO.

 Cabe mencionar que Roy pudo visitar el establecimiento, algo que se le negó con anterioridad al congresista Jason Crow, demócrata de Colorado, quien este lunes iniciará "visitas de inspección", en persona o por medio de un representante de su oficina, a ese centro de detención, donde se alojan unos 1,200 inmigrantes.

 Por su parte, Cristian Solano-Cordova, portavoz de la Coalición de Colorado por los Derechos de los Inmigrantes (CIRC) organizadora de la marcha, dijo que "inequívocamente" denuncian las acciones de los "manifestantes descontrolados" que reemplazaron las banderas.

 "Esos manifestantes pusieron en peligro a las familias indocumentadas que estaban participando en una vigilia pacífica. Seamos muy claros: esos manifestantes no están afiliados con CIRC", puntualizó el dirigente.

 A la vez, Metz explicó que una vez que se identifique a las personas involucradas, se determinará si participaron o no de conductas criminales.