NUEVA YORK.- En medio de la crisis de los opioides, las autoridades sanitarias de Estados Unidos están enfocándose en la lucha contra el vapeo con marihuana y en las organizaciones que producen cartuchos con THC.

Desde Nueva York hasta Nebraska y California, las autoridades confiscaron al menos 510,000 cartuchos de vapeo de marihuana y arrestaron más de 120 personas en los dos últimos años, según un cálculo de la Associated Press en base a entrevistas, documentos, informes periodísticos y comunicados de prensa.

Una mujer de Wisconsin, sus dos hijos adultos y otras cinco personas fueron acusadas hace poco de producir miles de cartuchos diarios con THC, sustancia dopante del cannabis. En la vecina Minnesota las autoridades dicen que encontraron en septiembre 77,000 cartuchos de marihuana en la casa y en el auto de un individuo que vive en los suburbios.

En Alabama los fiscales lidian con una cantidad creciente de casos de vapeo con marihuana en los tribunales para menores. Y en Nueva York las autoridades confiscaron unos 200,000 cartuchos ilegales en los últimos meses, a menudo mientras investigaban grupos sospechosos de traficar otras formas tradicionales de marihuana y otras drogas.

“Estamos dedicando más recursos para combatir estas organizaciones”, dijo Ray Donovan, agente especial a cargo de la oficina neoyorquina de la Administración de Control de Drogas (más conocida por sus siglas en inglés, DEA). “El mercado avanza en esa dirección. Estas organizaciones delictivas se abalanzan sobre cualquier modelo de negocios y tratan de sacar ventaja”.

El THC ha sido asociado con problemas pulmonares que están causando numerosas muertes y la búsqueda de cartuchos con esa sustancia añade una nueva dimensión a la batalla contra la crisis de los opioides y de otras drogas.

Las autoridades se están adaptando a la búsqueda de una forma de marihuana que viene en paquetes pequeños, no huele y puede ser confundida con sustancias de vapeo legales de nicotina. También tienen que decidir qué es admisible y qué no en estados donde la marihuana es legal.

El vapeo se ha popularizado en los dos últimos años entre los consumidores de marihuana, que lo ven como una alternativa más discreta y rápida a los cigarrillos de marihuana. En 33 estados se aprobó al menos el uso de la marihuana con fines médicos, pero en todos los estados están circulando cartuchos con la droga, que se venden a entre 20 y 50 dólares.

Se calcula que el mercado ilegal de vapeo con marihuana genera hasta $2.500 millones diarios, casi la misma suma que el mercado de cartuchos de marihuana legales, según BDS Analytics y Arcview Market Research, donde organizaciones que monitorean el mercado de cannabis.

El brote de problemas pulmonares causó alarma por la muerte de 47 personas en los últimos nueve meses, a los que se suman otras 2,200 que se enfermaron. Las autoridades exhortaron a la población a que evite vapear, sobre todo con productos del mercado negro que contienen THC, sustancia consumida por muchos de los que sufrieron trastornos de salud.

Para quienes promueven la legalización de la marihuana, el énfasis en los cartuchos de marihuana del mercado negro es un argumento a favor de la legalización y regulación de la droga a nivel nacional en nombre de la seguridad.

“La solución para que disminuyan los riesgos asociados con los productos de vapeo con THC es legalizar y regular el mercado, no aumentar los castigos y los arrestos”, dijo el director ejecutivo de NORML Erik Altieri.

Como madre de dos adolescentes, Ashley Rich sabía desde hace varios años que el vapeo con nicotina con sabores prendería entre los jóvenes (las autoridades sanitarias de EEUU lo consideran una epidemia). Como fiscal, temía que pronto se pondría de moda el vapeo con drogas ilícitas. “Eso es exactamente lo que estamos viendo”, dijo Rich, procuradora general del condado de Mobile en Alabama, donde la marihuana sigue siendo ilegal en todas sus formas.