Las autoridades estadounidenses anunciaron hoy la cancelación del simulacro de ataque nuclear que se lleva a cabo mensualmente en Hawái con motivo de la llegada de los restos de 55 militares caídos en la Guerra de Corea (1950-1953) que han sido devueltos por Corea del Norte.

La prueba del llamado Sistema Estatal de Sirenas de Advertencia al Aire Libre programada para mañana ha sido cancelada "con motivo de la ceremonia de repatriación de los restos mortales del personal militar estadounidense de Corea del Norte", anunció Thomas Travis, responsable de ese servicio de emergencias en un comunicado.

A raíz de los ensayos norcoreanos con misiles de largo alcance, las autoridades estadounidenses reanudaron en noviembre pasado los simulacros de ataques con sirenas antiaéreas de emergencia en Hawái ante un eventual ataque nuclear por parte de ese país.

"Queremos tener la certeza de que mantendremos la dignidad y la solemnidad que requiere la ocasión (...) en respeto por el servicio y sacrificio de estos valientes", dijo en el mismo comunicado el gobernador de Hawái, David Ige.

El vicepresidente de EE.UU., Mike Pence, tiene previsto asistir mañana, miércoles, a la ceremonia oficial de recepción de las 55 cajas cubiertas por la bandera de las Naciones Unidas que albergan los restos de los soldados, entregadas por Pionyang el pasado 27 de julio en la base aérea de Osan (Corea del Sur).

Con esto, ahora comienza la tarea de identificación de los cadáveres, que se cree que corresponden a soldados estadounidenses, aunque muchas otras naciones lucharon en la Guerra de Corea y es posible que con el tiempo se hayan confundido con otros.

La Guerra de Corea de 1950-1953 fue increíblemente violenta, con 36.940 estadounidenses muertos y otros 92.134 heridos, mientras que unos 7.699 combatientes figuran como desaparecidos del conflicto. 

Los simulacros mensuales de ataques con sirenas se reanudarán el martes 4 de septiembre próximo, según el anuncio oficial.